Te guste o no el estilo ‘almodovariano’, tenemos que reconocer que Pedro Almodóvar ha conseguido ser el director de cine más popular fuera de España desde Luis Buñuel. La estética y la comedia melodramática tan particular de sus obras, la elección de mujeres como protagonistas poderosas de argumentos novedosos y la naturalidad con la que el cineasta españoliza cada escena, han hecho que Almodóvar gane varios Premios Oscar e innumerables Premios Goya.

Hoy, el día en el que el director cumple 70 primaveras, repasamos las primeras películas que comenzaron a consolidar a Almodóvar como uno de los cineastas más referentes del cine español. Si aún te queda alguna por ver, ya sabes:

Mujeres al borde de un ataque de nervios (1988)

La sexta película de Almodóvar ya se ganó la nominación a los Oscar a mejor película extranjera y dos Premios Goya a mejor película y mejor guión original. Carmen Maura, protagonista y considerada por muchos la musa del director en sus primeras obras, pone voz a todas esas mujeres que han sufrido tras echarse un amante conocido por ser un mujeriego que entiende más bien poco de sentimientos femeninos y, peor aún, no hace nada por intentarlo.

Entre gente extravagante que entra y sale de casa de la protagonista (entre ellos Rossy de Palma, Julieta Serrano y un jovencísimo Antonio Banderas), valientes e inocentes actos que peligran la libertad de los personajes y un gazpacho con un ingrediente especial que guía el argumento de la obra, ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’ se convierte en un referente ochentero del cine español, del feminismo y de la comedia negra.

Todo sobre mi madre (1999)

Pegamos un salto temporal para hablar de 'Todo sobre mi madre', la película de finales de siglo que hizo que Almodóvar ganara el Oscar y el Globo de Oro a mejor película y mejor director en el Festival de Cannes.

El director vuelve a mostrarnos un argumento melodramático y arriesgado que, guiado por su estilo personal, nos habla de la vida, de la soledad y de la fuerza que pueden generarnos los sentimientos. No podemos olvidar que Almodóvar se adelantó al resto al hablar de la transexualidad en una época en la que la defensa de la libertad sexual se veía más bien poco en el cine.

¡Átame! (1989)

Volvemos atrás en el tiempo para hablar de otro clásico de Almodóvar que, aunque no fue tan popular como las películas anteriores, se ha consolidado como uno de los clásicos del director. En 'Átame' conocemos a Ricky (Antonio Banderas), un joven impulsivo que acaba de salir del psiquiátrico y decide raptar a Marina (Victoria Abril), una actriz de la que está completamente enamorado.

Lo curioso de este 'remake' es que, a pesar de lo escabroso de un argumento sobre secuestros y desapariciones, consigue hacernos reír, enamorarnos y presenciar escenas de sexo caóticas pero dulces mucho más realistas que lo que llegaba de la pornografía y de los romances de Hollywood.

Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón (1980)

La primera película de Pedro Almodóvar no fue bien recibida ni por el público ni por la crítica profesional: fue tachada de comedia grosera y de una técnica demasiado amateur (que además contaba con muy bajo presupuesto).

Sin embargo, aunque el director pecara de abrirse paso en el cine intentando impactar por todos los medios, Almodóvar nos hizo testigos de la esencia que le llevaría al éxito: mujeres protagonistas independientes, homosexualidad y humor negro rodeados de una de las grandes épocas españolas: La Movida Madrileña.

¿Qué he hecho yo para merecer esto? (1984)

Carmen Maura vuelve a protagonizar una película que resumía la frustrante vida de muchas mujeres de la época: Gloria está infelizmente casada, es ama de una casa en la que vive con su marido, sus hijos y su suegra y, además de trabajar en su humilde piso, es asistenta en otros hogares.

La película comenzaba a sugerirnos el talento que Almodóvar aguardaba, el feminismo que dominaría en sus obras y la elección de un reparto de jóvenes actores españoles que seguimos viendo en el cine y en la televisión actualmente.