Si todavía no sabes quién es Rosalía Vila es muy posiblemente que en las próximas semanas empieces a escuchar mucho sobre ella. Esta cantaora catalana de 25 años está muy cerca de publicar su segundo álbum, el primero con canciones propias tras debutar en 2016 con 'Los Ángeles', un sorprendente disco que versionaba temas clásicos del flamenco y que se llevó la ovación de crítica y público.

¿Una veinteañera revolucionando el flamenco? Los más puristas suelen ser los más escépticos y hay muchas miradas puestas en Rosalía, que parece querer experimentar más allá de este género. En su cuenta de Youtube está publicando paso por paso el proceso que está viviendo a la hora de grabar estas nuevas canciones. Y cada vídeo es una auténtica joya.

"Yo quiero ir hacia algo que no haya encontrado aún", reconoce Rosalía. La cantaora señala que mantiene la esencia de Los Ángeles pero que no tiene nada que ver con el disco que le hizo saltar a la fama, al menos en los círculos alternativos. Si en esa aventura le acompañó el productor y músico Raül Refree, para este nuevo proyecto está a su lado 'El Guincho'.

El músico canario, otrora revelación del indie, hace ahora las veces de productor y desde hace un tiempo es una persona muy cercana a Rosalía. Tener a alguien como 'El Guincho', que siempre se ha caracterizado por sus sonidos electrónicos y tropicales, evidencia que Rosalía no quiere quedarse 'anclada' en el flamenco sino que quiere experimentar nuevos caminos.

En su tercer vídeo, Rosalía desvelaba el título de su nuevo disco, 'El mal querer'. Un álbum que quiere ahondar en las pasiones, en ese amor lleno de ataduras. De momento no hemos podido escuchar ni un solo single y todo acerca del proyecto, salvo estos vídeos que se han subido desde su cuenta de Youtube, es un absoluto misterio.

A día de hoy, Rosalía no ha firmado todavía por ninguna discográfica pero a buen seguro todas las grandes potencias querrán firmarla porque este es el disco que va a revolucionar el flamenco y que va a convertir a la cantaora catalana en una auténtica estrella. No se olviden de su nombre.