A pesar de que el mundo del arte presume de ser abierto y creativo no siempre todas las decisiones que se toman en torno a él siguen esa línea. El museo Louvre de Paris nos sirve a modo de ejemplo.

Recientemente la directiva del museo ha rechazado exponer como parte de la Fiac international art una pieza de arte abstracto por considerarla "indecente" y para "no ofender a nadie".

La obra que ha generado la polémica no es más que una escultura donde pueden verse dos edificios en tonos rojizos que están colocados de tal forma que se alterna la posición vertical y horizontal de las piezas.

Firmada por colectivo artístico Atelier Van Lieshout la obra no buscaba despertar la mirada sucia de nadie y así lo declaró su fundador al The New York Times: "La pieza en sí misma no es muy explícita, es una figura bastante abstracta. No hay genitales, es algo inocente."

Así, en sintonía con el colectivo artístico la periodista del Huffinton Post denunciaba la retirada de la obra de arte en su cuenta de Twitter: "Hay un millón de desnudos en el Louvre pero esto es lo que colma el vaso, supongo", opinaba @shaneferro.