Vas a Ikea y justo antes de pasar por caja (y darte cuenta de que todas esas cositas de 2 o 3 euros que has ido echando al carro al final suman 500) te encuentras con un clásico: las bolsas azules de Ikea, tan útiles para cargar cosas grandes como inútiles a la hora de doblarlas.

Pues bien, ahora puedes sacar esta bolsa a todos lados para tomar algo o acudir a una reunión con estilo por el módico precio de 1.500 euros. La firma de alta costura Balenciaga ha presentado estos días un modelo de bolso nuevo diseñador por su director artístico Demna Gvasalia. Su nombre es Carry Shopper Bag, y tiene un innegable parecido con la bolsa azul (de nombre Frakta) del gigante de los muebles para montar sueco.

Como es normal su similitud ha dado vuelta por redes, especialmente después de que una agencia de publicidad sueca con un nombre con poca capacidad de expansión entre países hispanoablantes (se llama ACNE) utilizara su parecido para iniciar una campaña. En ella, dan algunos consejos para ahorrarte la diferencia de precio y no confundir a 'la original', con la copia de alta costura.

Este es el truco para no confundir la bolsa con el bolso:

1. Agítala. Si cruje, es la de verdad.

2. Multifuncional. Puede cargar un equipo de hockey, ladrillos y hasta agua.

3. Ensúciala. Una Frakta de verdad se puede limpiar con una simple manguera.

4. El precio en la etiqueta. Sólo 0,99 dólares

No es un fail como parece

Pero aunque tú, amigo del ahorro, te estés partiendo al leer esto imaginándote a señoras adineradas pagar tanto por lo que tu pagas 50 céntimos, tienes que saber algo. En realidad el bolso de Balenciaga no sufre una temeorsa coincidencia, sino que está hecho así de propio.

De hecho su diseñador, el georgiano Demna Gvasalia, ya ha sido conocido por hacer otras interpretaciones de ropas de la cultura popular. Por ejemplo, tuvo las narices de poner a la venta una camiseta promocional de la empresa de transporte DHL por 230 euros y agotar existencias. Definitivamente, no te culpes si no entiendes de moda ¯\_(ツ)_/¯.