Descubren una misteriosa sustancia en la atmósfera
Por primera vez, se ha logrado probar la existencia de trióxidos en la atmósfera, un compuesto que podría afectar tanto a la salud humana como al clima.
Hito histórico para la ciencia. Se ha descubierto por primera vez la formación en la atmósfera de trióxidos, un compuesto extremadamente oxidante que probablemente afecte tanto a la salud humana como a nuestro clima global.
A lo largo de los últimos años, se había especulado sobre si los trióxidos (compuestos químicos con tres átomos de oxígeno unidos entre sí y altamente reactivos) se encontraban en la atmósfera. Pero hasta el momento, nunca se había logrado probar de forma inequívoca.
El estudio acaba de ser publicado en Science. Su autor, el profesor Henrik Grum Kjaergaard, del Departamento de Química de la Universidad de Copenhague, ha resaltado en un comunicado que “el tipo de compuestos que descubrimos son únicos en su estructura. Y, debido a que son extremadamente oxidantes, lo más probable es que produzcan una serie de efectos que aún tenemos que descubrir”.
Los hidrotrióxidos (ROOOH), como se les conoce, son una clase completamente nueva de compuestos químicos. Investigadores de la Universidad de Copenhague (UCPH), junto con compañeros del Instituto Leibniz para la Investigación Troposférica (TROPOS) y el Instituto de Tecnología de California (Caltech), han demostrado que estos compuestos se forman durante la descomposición atmosférica de varias sustancias conocidas y ampliamente emitidas, como el isopreno y el sulfuro de dimetilo.
Posibles efectos nocivos para la salud
Pese a que aún no está del todo claro y será necesario seguir investigando para confirmarlo, los científicos tienen una fuerte sospecha de que los trióxidos pueden penetrar en pequeñas partículas en el aire, conocidas como aerosoles, que representan un peligro para la salud y pueden provocar enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
“Lo más probable es que ingresen a los aerosoles, donde formarán nuevos compuestos con nuevos efectos. Es fácil imaginar que se forman nuevas sustancias en los aerosoles que son dañinas si se inhalan. Pero se requiere más investigación para abordar estos posibles efectos en la salud”, ha afirmado Henrik Grum Kjaergaard.
Por otro lado, los aerosoles también tienen un impacto en el clima. Y, según los investigadores, existe una alta probabilidad de que los hidrotrióxidos afecten la cantidad de aerosoles que se producen.
La coautora del estudio, Eva R. Kjaergaard, ha explicado que su influencia en el clima se debería a que “como los aerosoles reflejan y absorben la luz solar, esto afecta el balance de calor de la Tierra, es decir, la proporción de luz solar que la Tierra absorbe y devuelve al espacio”. De esta forma, “cuando los aerosoles absorben sustancias, crecen y contribuyen a la formación de nubes, lo que afecta la temperatura de la Tierra”.