Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

ACTUALIDAD

¿Qué pasaría si no cambiásemos la hora y cómo te afectaría según dónde vives?

El cambio en los relojes que se produce en el mes de marzo tiene como principal objetivo que se produzca un mayor aprovechamiento de la luz natural.

¿Qué pasaría si no cambiásemos la hora y cómo te afectaría según dónde vives?
Europa Press - ArchivoEuropa Press

El cambio de hora que se produce cada año en octubre y marzo siempre trae consigo el debate sobre la conveniencia de realizar esta tarea. Así, es habitual que salgan opiniones a favor y en contra entre los ciudadanos. Una encuesta que realizó la Comisión Europea en 2018 sobre esta cuestión mostró esta disparidad de criterios, aunque arrojó un claro ganador.

Y es que en aquella ocasión fueron mayoría los que se mostraron en contra de mantener el cambio de hora. En 2019, el Parlamento Europeo respaldó poner fin a esta situación a partir de marzo 2021, con una resolución que permitía a cada país elegir si quería mantener el horario de verano o el de invierno, pero finalmente esta iniciativa no salió adelante.

De esta manera, se ha seguido realizando el cambio de hora y esta madrugada del 26 al 27 de marzo será necesario ajustar los relojes para adaptarlos al horario de verano, por lo que a las 2:00 deberán marcar las 3:00 horas.

La ubicación, factor decisivo

El cambio que se realiza en este mes de marzo tiene como principal objetivo que se produzca un mayor aprovechamiento de la luz natural en las horas de la jornada laboral, ya que el nuevo horario provoca que anochezca más tarde.

Por lo tanto, si no se llevase a cabo esta tarea uno de los efectos que resultarían más evidentes sería que la noche llegaría antes de lo que es habitual en los meses de más calor. No obstante, el cambio de hora no afecta por igual a todas las provincias españolas, ya que el número de horas diurnas varía en función de la comunidad que se trate.

Este hecho es debido a que la ubicación juega un factor decisivo en este factor, al igual que la fecha en la que nos encontremos. El motivo es la esfericidad de la Tierra y a su inclinación con respecto al Sol. Así, por ejemplo, anochecerá más tarde en A Coruña que en Barcelona. No obstante, en ambos casos si no se produjese el cambio el anochecer llegaría antes de lo que estamos acostumbrados a partir del mes de marzo.

Algunos expertos apuntan que España debería mantener el horario de invierno debido a que estamos más cerca de la hora solar que nos corresponde según nuestro meridiano, que es el de Greenwich. De esta forma, tendríamos el mismo horario que Portugal o el Reino Unido.