Después de un mes de invasión en Ucrania, y tras hacerse con el control de algunas de las ciudades y puntos estratégicos más importantes del país, Rusia se prepara para centrarse en su nuevo objetivo, que no es otro que consolidar su posición en el Donbás.

Así lo ha confirmado 'Reuters', que señala a la posibilidad de que el ejército ruso se centre en liberar a la región situada en el este de Ucrania, de la que Vladimir Putin reconoció la independencia tanto de Donetsk como de Lugansk, en los días previos al comienzo de la ofensiva militar desplegada en territorio ucraniano. Desde el Donbás, se solicitó a Putin en febrero de la necesidad de proteger a la población de ambas regiones y reforzar la cooperación en diferentes ámbitos.

Un anuncio que llega después de que un alto mando del Ejército de Rusia diese prácticamente por terminada este viernes la primera etapa de la denominada "operación militar especial" en Ucrania. "En general, las principales misiones de la primera etapa de la operación han sido cumplidas", afirmó en una comparecencia de prensa el jefe adjunto del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas de Rusia, coronel general Serguéi Rudskói, que mencionó la reducción "considerable" del potencial combativo de las fuerzas ucranianas.

Esta noticia llega también después de que el diario 'The Times' apuntase a la posibilidad de que los servicios secretos rusos hayan podido plantear la posibilidad de deponer a Putin. Este medio informa que habría en cartas enviadas a Vladimir Osechkin, una de las personas más buscadas de Rusia por su trabajo denunciando los abusos en las cárceles, que “el caos y el descontento” se habrían apoderado de los servicios de seguridad tras la invasión de Ucrania.

De este modo, Rusia encara una nueva fase en su estrategia, que pasaría a estar centrada en objetivos más concretos, ante la resistencia ucraniana, los fallos logísticos, más los soldados y generales rusos caídos en combate. Pese a hacerse con Jersón, Chernígov y Konotop, cercar Jarkov, la segunda ciudad más importante el país, y la resistencia de Mariupol, Rusia no se ha hecho con el control total de Ucrania , tal y como preveían.

Por el momento Mariupol no se ha rendido de forma definitiva, pese a los contínuos bombardeos a los que ha sido sometido la ciudad, Kiev se resiste a la ofensiva rusa y el norte sigue encallado. Motivos suficientes para reordenar los planes iniciales, y enfocarlos a objetivos más limitados, según indica la citada agencia de noticias. Desde el Kremlin sostienen que los rebeldes prorrusos dominan el 93% de Lugansk y el 53% de Donetsk, por lo que el objetivo pasaría por un dominio total de ambas.

Rusia informa de más de mil soldados fallecidos

Otro de los temas tratados por el ejército ruso ha sido el número de bajas de soldados y altos mandos. Según ha informado el jefe de la Dirección Operativa Principal, Sergei Rudskoi, han fallecido un total de 1.351 soldados rusos, mientras que 3.825 han resultado heridos durante las cuatro primeras semanas de conflicto bélico.

Se trata del primer recuento oficial del Kremlin, después de que las cifras ofrecidas desde Ucrania apuntasen a un total de 14 mil soldados rusos fallecidos, mientras que desde Estados Unidos situaron la cifra en unos siete mil fallecidos.