La dura acusación de Biden a Putin: "Es un criminal de guerra"
El presidente estadounidense ha arremetido contra su homólogo en Moscú debido a la invasión rusa en Ucrania. "Es un criminal de guerra", sentenció.
El Presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha arremetido contra su homólogo en Moscú, Vladimir Putin, debido a la decisión del Kremlin de intensificar los ataques en plena ofensiva el ejército ruso en Ucrania.
Por su parte la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que el presidente estadounidense realizó dicha afirmación "en relación a lo que ha visto por la televisión" y calificó las acciones decretadas por Putin como "acciones bárbaras de un dictador brutal". Además, no es la primera vez que desde la Casa Blanca utilizan una afirmación semejante, ya que fue empleada cuando el ejército ruso atacó la central nuclear de Zaporiyia.
Biden fue el primer líder internacional en anunciar sanciones para Rusia. Entre ellas, la congelación de los activos financieros del Banco Central ruso, el veto a las importaciones de gas y petróleo procedentes de Rusia, la prohibición de todo tipo de transacciones con el país ruso, el cierre del espacio aéreo para todas las aerolíneas procedentes de Rusia y la elaboración de un listado de los oligarcas y magnates que mantendrían presuntos vínculos con el Kremlin.
"Vamos a imponer restricciones a estos millonarios corruptos, y a las empresas que se han beneficiado", dijo Biden. En ese listado figuran algunos magnates como Roman Abramovich, propietario del Chelsea, que ya no podrá participar de la gestión ni tampoco de la venta del club, ante las sanciones decretadas por el Reino Unido y la Unión Europea.
Además, el presidente norteamericano destinó más de 13 mil millones de dólares en ayuda militar y humanitaria a Ucrania, junto con ayudas económicas para el país presidido por Volodímir Zelenski. Todas las sanciones impuestas a Rusia también provocaron el éxodo de varias multinacionales establecidas en territorio ruso, entre las que se encuentran algunas compañías norteamericanas como Apple, Microsoft o McDonald's.
Desde el Kremlin no han tardado en responder a estas declaraciones del máximo mandatario norteamericano. "Las declaraciones son inaceptables e imperdonables". Rusia debe abonar 117 millones de dólares (unos 106,7 millones de euros) si no quiere afrontar una suspensión de pagos. Con sus reservas congeladas, Moscú se enfrenta ahora a un nuevo riesgo económico.
En caso de que Moscú no abone hoy su deuda, se le concederá un periodo de gracia de 30 días. Después de ese período, entrará de forma oficial en suspensión de pagos. Rusia cuenta con capital suficiente para saldar la deuda, pero la congelación de casi la mitad de sus reservas en moneda extranjera (300.000 de los 643.000 millones de dólares) están paralizadas.