El conflicto generado en Ucrania tras el ataque de Rusia en su terrotorio ha tenido consecuencias inmediatas en gran parte del mundo. Con el paso de los días, el precio de los carburantes se ha disparado y en algunos productos, como el aceite de girasol, la demanda se ha disparado mientras que las importaciones desde Ucrania se han limitado. Según explica Rubén Moreno, director general de Produlce, hay reservas "para entre dos y cuatro semanas".

Ante tal situación, Pedro Sánchez anunció este domingo, en la XXVI Conferencia de Presidentes, un plan de choque con el limitar el efecto de estas consecuencias de la guerra. "El Gobierno de España está dispuesto a hacer todo lo que está en nuestra mano", dijo el presidente del Ejecutivo. Pero, ¿qué opciones hay para poder llevar a cabo una rebaja en los carburantes?

Cadena SER explica los impuestos, así como los sectores, en los que el Gobierno puede actuar y el margen de maniobra que tiene para poder rebajar la carga de la guerra en los ciudadanos. Una medida que, por ejemplo, en Francia ya han anunciado: la rebaja de 15 céntimos por litro a partir del próximo mes.

El margen de maniobra del Gobierno

Tal y como hiciera con el recibo de la luz, reducido el pasado mes de junio del 21% al 10% tras las importantes subidas en el precio, el Gobierno puede aplicar una medida similar en el caso de los combustibles. En el caso de la luz, según los cálculos del Ejecutivo, ha supuesto entre 10.000 y 12.000 millones de euros menos recaudados.

Mientras en el caso de la luz ya hay escaso margen para más rebajas, en el del gasóil y la gasolina sí que se podía hacer más. En primer lugar, reducir el IVA del actual 21% al 10%, tal y como se hizo con la luz. Y, en segundo caso, una bajada en el impuesto de los hidrocarburos.

Esta segunda propuesta es la principal opción sobre la que se trabaja, ya que las comunidades autónomas en las que gobierna el PP, y que han pedido rebajas fiscales, también tendrán que soportar su coste: de los cerca de 12.500 millones de recaudación que está previsto para el impuesto de hidrocarburos, 6.000 son para el Estado y 6.500 para las autonomías.

Actualmente, por cada litro de gasolina que se paga, el 47% corresponde a impuestos. Algo similar ocurre con el diésel, con un 43% de impuestos por cada litro que repostamos. En el año 2019 ya hubo una rebaja de casi 10 puntos, lo que dejó a España en la zona baja de los países europeos que más recaudan con este impuesto. La media europea es de un 52% y un 46%, respectivamente.