Los síntomas más frecuentes de la variante Ómicron
La carga viral aumenta durante los dos días previos a la aparición de los síntomas. Dolor de cabeza, falta de apetito y estornudos, entre los más frecuentes.
La variante Ómicron se ha convertido en la variante predominante en pocos meses. Los contagios y la incidencia acumulada de muchos países aumentaron durante el pasado mes de diciembre y las primeras semanas del mes de enero, periodo en el que se llegó al pico de contagios.
Su alta capacidad de transmisibilidad, el amplio número de mutaciones que presenta en su proteína pico, son algunas de las características más destacadas. A diferencia de otras variantes, Ómicron presenta un periodo de incubación menor, que puede ser de hasta tres días hasta la aparición de los primeros síntomas de la COVID-19. Otra diferencia es la rapidez de propagación, que es mayor también en Ómicron que en otras variantes como Delta.
Con respecto a la duración del contagio y de los síntomas más frecuentes de la variante, depende en gran medida de la carga viral de las personas contagiadas. Según el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC), el periodo en el que es más probable contagiarse por Ómicron durante la primera semana de la enfermedad, especialmente en los primeros días tras la infección por coronavirus.
En cuanto a los síntomas más frecuentes, se encuentran algunos como el dolor de cabeza, la falta de apetito o los estornudos. Otros síntomas característicos de Ómicron, y que en otras variantes no se detectaron, son la fatiga, fiebre, lumbalgia, la sudoración nocturna, conjuntivitis, nauseas o dolores musculares.
Eficacia del 91% contra hospitalizaciones
Por otra parte, los CDC realizaron un estudio para comprobar la eficacia de la vacuna contra la COVID-19 para determinar el verdadero alcance de la eficacia contra la variante Ómicron. Ésta sería del 91% y ofrecería una mayor protección a las personas que han recibido las tres dosis. Sin embargo, y siempre según este centro de investigación norteamericano, la eficacia se reduce hasta el 78% pasados cuatro meses.
"Las vacunas de ARNm, incluida la vacuna de refuerzo, son muy eficaces, pero su eficacia disminuye con el tiempo", defendió uno de los autores del estudio, el doctor Bryan Dixon. El propio experto también informó que la tercera dosis es necesaria para población de riesgo. "Nuestros hallazgos sugieren que pueden ser necesarias dosis adicionales para mantener la protección", expuso.
Posible aumento de positivos en otoño e invierno
Otoño e invierno podrían ser dos de las épocas de este año en los que podría producirse un aumento de los contagios por coronavirus. Así lo ha asegurado la viróloga del CSIC, Margarita del Val, en el XI Ciclo de Seminarios 'Avances en Biomedicina', organizado por la Facultad de Medicina de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) en Ciudad Real.
Sin embargo, la viróloga ha apuntado a la alta tasa de vacunación en España - más del 91% de la población diana con la pauta completa - como uno de los factores que han influido en la mejora de los últimos registros de contagios. "La variante Ómicron nos ha pegado un patadón para infectar a muchas personas, muchas más de las que están registradas oficialmente hará que España pueda alargar la temporada de bonanza, al contar con un alto nivel de inmunidad híbrida", defendió.