Elon Musk, fundador de Tesla, SpaceX, PayPal o Neuralink, terminó 2021 siendo elegido Personalidad del Año por la prestigiosa revista Time y también se coronó con el 'título' a persona más rica del mundo. 194.513.150 millones de euros componen su fortuna, que se ha multiplicado en el último año gracias a la revalorización de las acciones de Tesla. Con ello, Musk ha superado a otros magnates como Bill Gates o Jeff Bezos, otros de los grandes nombres del sector tecnológico.

Sin embargo, Musk no nació siendo millonario. Si bien es cierto que nació en una familia acomodada, se ha ganado su riqueza gracias a su ingenio y su buen ojo para los negocios. A los 12 años diseñó su primer videojuego y a los 17 años huyó del servicio militar obligatorio de su país natal, Sudáfrica, y puso rumbo a Canadá. Allí comenzó trabajando en la granja de unos primos y se matriculó en la Universidad de Queens, en la provincia de Ontario.

La Universidad de Pensilvania le acogió en 1992 y comenzó sus estudios en física y empresariales, donde ideó su primer negocio: convirtió una casa cercana al campus en un club nocturno. De ahí pasó a Silicon Valley, hogar de grandes programadores, y luego fundó Zip2, una empresa que funcionaba como directorio de compañías en línea; es decir, como un libro de páginas amarillas con mapas.

PayPal, el verdadero comienzo

Esta empresa fue la que le hizo millonario. Zip2 llegó a acuerdos con prestigiosos medios de comunicación como el New York Times y, en 1999, fue vendida a Compaq por 270 millones de euros, de los cuales más de 19 millones fueron para Musk. Aunque era una persona que sabía muy bien cómo invertir el dinero, adquirió un McLaren F1 por cerca de un millón de euros, algo que según él mismo no era "coherente con el resto de mi comportamiento". Un año después, lo estrelló.

Musk utilizó el resto del dinero para crear una empresa de banca online, X.com, que se fusionó al año siguiente con Confinity, formando lo que terminaría siendo PayPal. El magnate fue nombrado CEO de la nueva compañía, aunque más tarde fue despedido por desavenencias con la junta directiva. A pesar de ello, conservó sus acciones, que con la venta de la empresa a eBay por 1.320 millones de euros le reportaron 160 millones.

Esta operación fue la que le llevó a fundar SpaceX, con el objetivo de colonizar Marte, y a comprar Tesla, que hasta entonces era solo una idea de crear coches deportivos eléctricos. El uso de células de iones de litio en los vehículos supuso una revolución en el sector automovilístico, ya que aumentó con creces la autonomía de los coches eléctricos existentes hasta entonces.

De la quiebra a la cima

Ambas empresas estuvieron a punto de llevarle a la quiebra. SpaceX tuvo varios lanzamientos fallidos y Tesla sufrió problemas con el incendio de sus prototipos de baterías, lo que casi acaba con la empresa en 2008. No obstante, ese año SpaceX llegó a un acuerdo con la NASA por 1.408 millones de euros. En 2012, Tesla comenzó la fabricación de su primer vehículo para lanzar al mercado.

Esos fueron los años que catapultaron a Musk a la cúspide de la riqueza, ya que sus inversiones comenzaron a darle la razón. El resto es historia. Ahora, Tesla es un gigante del mercado de los vehículos eléctricos y SpaceX encabeza la exploración espacial privada. Solo sus acciones en Tesla, el 17% del total de la empresa, tiene un valor de más de 150.000 millones de euros, que es la gran parte de su patrimonio neto.