Tras la pandemia, el mercado inmobiliario parece haberse recuperado con creces y hay una 'fiebre' de compra de viviendas. En este panorama, un mercado que no para de crecer es el de las casas prefabricadas, unas viviendas con precios muy competitivos y con grandes ventajas. Hay, incluso, algunas empresas que han decidido construir estas casas en forma plegable, para hacer más cómodo su almacenaje, transporte y construcción.

Así lo recoge el portal inmobiliario Idealista, que señala a la empresa letona Brette Hays como la inventora de esta modalidad de casas prefabricadas. La principal novedad que traen estas viviendas es que para montarlas se necesitan apenas tres horas, ya que cuentan con un sistema de bisagras de 100 ciclos. Además, pueden instalarse en cualquier superficie nivelada sin necesidad de cimentación, lo que simplifica bastante su 'construcción'.

Tatjana Boreckaja, representante de Brette Haus en Reino Unido, ha hablado con Idealista sobre el formato ideado por su empresa: "El mecanismo de plegado está diseñado especialmente para trabajar con madera dura y plegar pesos elevados. La fontanería, la electricidad y los muebles prefabricados están fijados para que cuando se entregue no se caiga nada. Proporcionamos a los clientes instrucciones de cómo plegarla y desplegarla para que puedan reubicarla cuando quieran".

¿Cuánto cuestan?

La empresa original de Letonia trabaja en torno a tres modelos: Compact, Urban y Rustic. La opción más pequeña tiene una superficie de 28 m2 y la más grande se extiende hasta los 47 m2. El 80% del precio de estas viviendas está marcado por el coste de la madera, un material que se ha encarecido, por lo que los comprar una de estas casas puede costar actualmente entre 54.000 y 78.000 euros.

Por último, otra de las ventajas que tienen estas viviendas es que se pueden personalizar e, incluso, configurarlas como hogares inteligentes o viviendas autosuficientes, incluyendo paneles solares. Además, es una opción sostenible, ya que se utiliza madera laminada cruzada para fabricarlas, lo que disminuye el impacto de su construcción sobre el medio ambiente.