Así trabajan los laboratorios en una vacuna contra la variante Ómicron: Pfizer, Moderna, AstraZeneca...
La nueva variante del coronavirus ha puesto en "alerta" a los científicos y laboratorios por su elevada tasa de transmisibilidad y su gran número de mutaciones.
La variante del SARS-CoV-2 surgida en Sudáfrica y que se ha denominado como Ómicron ya es una de las que más preocupación suscita ante los científicos. Su reciente descubrimiento, que hace que apenas se haya podido analizar; su elevada tasa de reinfección y de transmisibilidad; y el gran número de mutaciones que posee la hacen una variante con "mucho riesgo" para la población, según los expertos. Por ello, los laboratorios más importantes ya trabajan en una vacuna para combatirla.
Pfizer-BioNTech, adaptación en 100 días
La alemana BioNTech, que junto con Pfizer ha desarrollado una de las vacunas más eficaces contra el COVID, ya está investigando sobre Ómicron y confía en que el proceso de adaptación dure seis semanas. Un portavoz de la empresa asegura que entienden "la preocupación de los expertos" sobre esta variante, ya que es muy distinta de las conocidas hasta ahora. El laboratorio alemán espera tener la información suficiente sobre ella en dos semanas, para saber hasta qué punto sortea la eficacia de la vacuna actual. Una vez obtengan esta información, esperan tenerla adaptada en 100 días.
Moderna trabaja con tres líneas de actuación
El laboratorio estadounidense de Moderna anunció este viernes que también está trabajando para adaptar su vacuna a esta nueva variante, para que también sea eficaz contra ella. En un comunicado, señalan que Ómicron supone un "riesgo potencial significativo para acelerar la disminución de la inmunidad natural e inducida por vacunas". Aunque, a diferencia de BioNTech, no dan una fecha aproximada, aseguran que se encuentran recabando información sobre el comportamiento de la variante ante la vacuna, para adaptarla lo más rápido posible a aquella. Otras soluciones planteadas son la aplicación de una dosis mayor de la actual inyección o dos candidatos de refuerzo multivalente que incluyen algunas de las mutaciones virales presentes en la nueva variante.
Johnson & Johnson, recabando datos
Este laboratorio está probando la efectividad de su vacuna, que según un estudio reciente está cercana a un 73%, contra la nueva variante. Sin embargo, solo informan de que se encuentran "monitoreando de cerca las nuevas cepas del virus COVID-19 con variaciones en la proteína de pico SARS-CoV-2", por lo que no se sabe si adaptarán la vacuna actual o si seguirán otra línea de actuación.
AstraZeneca
La empresa británica está probando su terapia de combinación de anticuerpos contra la nueva variante en lugares donde se ha detectado su presencia. Desde el laboratorio mantienen la "esperanza" de que su vacuna "mantenga la eficacia, ya que comprende dos potentes anticuerpos con actividades diferentes y complementarias contra el virus".