Cada depósito tiene una capacidad que depende del modelo del coche y de sus características. Además, el consumo de carburante es distinto en cada vehículo, e incluso afecta el tipo de conducción de cada persona. Por lo tanto, no existe una cifra exacta sobre la duración de la reserva del combustible que se pueda aplicar a todos los coches.

Aunque no exista un número preciso, si que se puede realizar una estimación. La reserva puede rondar, a grandes rasgos, entre los 50 y los 120 kilómetros. Sin embargo, la recomendación es no apurar demasiado de la reserva, cuando queden menos de 50km, ya que no es una cifra exacta y precisa, sino orientativa, y el riesgo de quedarse tirado en la carretera es alto. 

La recomendación de repostar antes de que el marcador indique el uso del combustible reserva es especialmente importante en los coches pequeños, ya que son los que ofrecen menor autonomía. Los coches grandes normalmente tiene una mayor autonomía porque tiene depósitos más grandes. 

Los coches con más autonomía

Conforme más grande es un coche, más amplia será su reserva, ya que no se almacena en un recipiente auxiliar, sino que es un porcentaje de litros del depósito principal, es decir, el porcentaje varía en función de la capacidad del depósito. Por lo tanto, los modelos grandes son los que tienen una reserva  cercana a los 120 kilómetros, mientras que los utilitarios brindan un excedente aproximado de 50 kilómetros.

No se puede confiar en la autonomía que marca el coche

Hoy en día, todos los coches disponen de un ordenador de a bordo con una función que marca la autonomía en kilómetros en tiempo real del vehículo. Sin embargo, no es una cifra fiable que se pueda tomar como referencia, ya que la autonomía se calcula tomando como referencia el consumo de combustible, por lo que varía dependiendo de si se realiza una conducción eficiente o deportiva. Además, la autonomía puede llegar incluso a crecer si iniciamos una conducción ultra eficiente, o por el contrario se desploma si se acelera bruscamente. 

¿Qué pasa si me quedo sin gasolina?

La Dirección General de Tráfico podría llegar imponer una multa de hasta 3.000 euros si un vehículo se queda sin combustible. Aunque no aparece como infracción en el Reglamento General de Circulación, la situación que puede desencadenar quedarse con el depósito vacío si que puede producir que se realicen infracciones sancionables, conforme explica Neomotor.

Cuando el vehículo se ha quedado sin gasolina lejos de una gasolinera, una de las opciones es trasladar el combustible al vehículo. Siempre que se transporta combustible, se debe llevar en recipientes homologados para ello. Si las autoridades encuentran a un conductor con gasolina en una botella común o en cualquier otro envase no homologado, pueden sancionar con una multa de hasta 3.000 euros.