Detienen a tres personas de la empresa del teleférico italiano tras el accidente
Según la fiscal que investiga el caso, los tres detenidos eran conscientes de que uno de los frenos de emergencia estaba desactivado a propósito.
Las investigaciones del accidente de teleférico que provocó 14 muertes hace varios días en la región italiana del Piamonte se ha saldado con la detención de tres personas. El dueño de la empresa que gestionaba el teleférico, el director y el jefe de operaciones eran conscientes de que uno de los frenes de emergencia había sido desconectado adrede con el fin de solventar una anomalía.
La fiscal jefe de Verbania, Olimpia Bossi, acusa de homicidio múltiple doloso, desastre por negligencia y eliminación de herramientas para evitar accidentes de trabajo al dueño de 56 años de la empresa Ferrovie del Matorane y a los dos altos cargos. Bossi ha explicado ante los medios que “los tres detenidos habían estado al tanto del fallo en el sistema de frenos de seguridad durante semanas".
El teleférico de Mottarone, uno de los más largos de Europa, había vuelto a abrir en abril tras los cierres por la pandemia. En las primeras investigaciones ya se vio cómo el accidente se pudo producir por el sistema de frenos. Una horquilla en uno de los frenos de emergencia se había manipulado para que quedase desactivado y que no produjese el bloqueo continuo del sistema.
Lo admitieron los detenidos
En la declaración, los detenidos reconocieron que no tomaron la decisión de reparar el sistema de frenos debido a motivos económicos, ya que, según la fiscal “el sistema presentaba anomalías y habría necesitado una intervención más radical, con un parón prolongado de la actividad del teleférico”. Sin embargo, la compañía había tenido beneficios en los últimos años.
La rotura del cable de soporte a 5 metros de que la cabina llegase a la estación provocó su caída a más de 100 kilómetros por hora durante 54 metros de altura. Una caída que nunca se habría producido en el caso de que el sistema de frenos hubiese estado activado. 14 personas fallecieron y solo hubo un superviviente, un niño de cinco años, que continúa en estado crítico.
Eitan Biran, que perdió a sus padres, a su hermano y sus dos bisabuelos en el accidente, empezó a despertar del coma inducido este martes. El director del complejo hospitalario donde está siendo atendido ha señalado que las precauciones principales ahora son las consecuencias "que pueden surgir como consecuencia del politraumatismo"