Hace unos años todas las ficciones sobre el futuro pensaban que en la actualidad existirían aviones con la misma función que los coches y que se podría circular por el aire. De momento eso no se ha llevado a cabo, pero se trabaja en que se realicen carreras aéreas. Y para ello, la compañía australiana Alauda Aeronautics ha comenzado la producción en serie de un vehículo aéreo que pueda competir en los próximos meses.

Se trata de un ‘bólido’ eléctrico tripulado capaz de volar a una velocidad de hasta 120 kilómetros por hora, de manera que podría participar perfectamente en esta especie de carreras similares a las de la Fórmula 1 que están siendo pensadas, según cuenta el Daily Mail.

Su nombre es Airspeeder MK3 y ya se estarían ensamblando diez modelos de este vehículo en Adelaida (Australia). La idea es que puedan alcanzar una altura de hasta 500 metros, pudiendo ser pilotado de manera remota.

Algunas características de la aeronave

El Airspeeder MK3 despega y aterriza de manera vertical. Está hecho de fibra de carbono, con un peso de 130 kg y con la capacidad de levantar un peso aproximado de 80 kilos.

Posee ocho rotores, tecnología de teledetección LIDAR, sistemas de radar para que no se choque y unas baterías reemplazables de 300 kW de potencia. Estas baterías se pueden ajustar para ofrecer diferentes perfiles de suministro de energía según lo requiera un hipódromo determinado, por ejemplo, para adaptarse mejor a las curvas y ascensos rápidos, o para centrarse en la velocidad absoluta en línea recta. En definitiva, es como una mezcla entre un avión de combate, un coche de Fórmula 1 y un helicóptero.

Posibles carreras aéreas en el futuro

Como se ha dicho, estos vehículos están especialmente diseñados para la carrera, para alcanzar grandes velocidades y mucha aerodinámica. La producción de los Airspeeder puede ayudar a que poco a poco se vayan diseñando y produciendo más coches voladores de este estilo, asentándose la movilidad aérea.

Algunas de las grandes marcas de coches se iniciaron primeramente en el mundo de las carreras, y Alauda Aeronautics pretende también dar sus primeros pasos así antes de que la movilidad por el cielo se asiente y se puedan producir otro tipo de vehículos. “Algunos de los primeros Mercedes, Bentleys y Renaults fueron autos de carreras”, explica el fundador de Airspeeder y Alauda Aeronautics, Matthew Pearson, en unas declaraciones recogidas por el medio inglés.

“Los pioneros de estas marcas sabían que para avanzar en una revolución de la movilidad, debían construir sus máquinas para las carreras. En Airspeeder, nos hacemos eco de esa filosofía con orgullo”, sostiene, añadiendo: “Para acelerar la llegada de la tecnología avanzada de movilidad aérea, debemos aprovechar la competencia deportiva”.

Por lo pronto, estas carreras sin tripulación y de control remoto podrían tener lugar este mismo verano en tres continentes.