La imagen de los ‘coches voladores’ es algo que siempre estaba presente en toda película de hace unos diez años que hablara sobre el futuro. Sin embargo, parece que este invento está tardando en llegar. Son varios fabricantes los que están investigando en ello, y el último en sumarse ha sido el alemán Volkswagen.

El fabricante de automóviles más grande de Europa ha confirmado en un comunicado que se encuentra estudiando el desarrollo de estos vehículos voladores en China. “Estamos investigando conceptos y socios potenciales en un estudio de factibilidad para identificar la posibilidad de industrializar este enfoque”, explica.

De esta manera, hacía oficial que la “movilidad vertical” puede ser el siguiente paso a dar por Volkswagen para innovar en la conducción, con estos viajes aéreos personales.

Por qué en China y la dificultad del plan ideado

¿Cuál es el motivo por el que Volkswagen se ha ido hasta China para probarlos y no en su continente? La realidad es que el país asiático es el mercado automovilístico más grande del mundo, y encima es el cliente principal del fabricante alemán.

En el último año ha vendido el triple de vehículos eléctricos y las entregas de coches híbridos enchufables también han crecido en un 175%, muestra de que de momento no le está yendo nada mal la innovación. Sin embargo, la movilidad vertical es más compleja que la eléctrica, ya que los coches viajarían junto a drones o incluso aviones y también necesitarían de una regulación que tardaría años en hacerse.

Recientemente, el director de Volkswagen China, Stephan Wöllenstein, confirmó en una entrevista que un primer avance sería desarrollar un dron con licencia, para así ayudar a una futura participación en el mercado de la movilidad por el aire, y no por la calle.

Ni es el primero ni será el último en unirse

Volkswagen ha sido el último fabricante en sumarse, de momento, al listado de empresas que han optado por innovar en este aspecto e intentar desarrollar un ‘coche volador’. Probablemente, no será ni mucho menos el último, ya que es una idea publicada en multitud de sitios, y presente en los planes de la mayoría de compañías.

Por ejemplo, el mes pasado, en el Consumer Electronics Show de Las Vegas, tanto Uber como Hyundai enseñaron cómo pretendían ellos crear un taxi volador electrónico. En noviembre, otra empresa alemana, Lilium, hizo oficial el anuncio de apertura de su primer centro dentro de la industria de despegue y aterrizaje eléctricos verticales (eVTOL), en Orlando (EEUU). También está desarrollando un avión-coche de este tipo.

Antes, en septiembre, la empresa japonesa Sky Drive Inc. hizo incluso una demostración pública. Empresas como Porsche, Toyota o Daimler están apoyando a nuevas empresas dentro de este sector tan concreto para que sigan aportando nuevas innovaciones en la búsqueda del modelo definitivo que se consolide en el mercado.