El conocido como Cheque Familiar es una ayuda que proporciona el estado a las familias numerosas, a las monoparentales con dos hijos o más o las que tengan ascendientes o descendientes con algún tipo de discapacidad. Se trata de una deducción en el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas, por lo que no se trata de una prestación directa.

Requisitos

Para optar al Cheque Familiar, el solicitante deberá estar trabajando, por cuenta ajena o por cuenta propia, o bien cobrando la prestación por desempleo o una pensión. Además, deberá cumplir alguno de los siguientes supuestos:

• Familia numerosa general (tres o más descendientes y situaciones equiparables).
• Familia numerosa especial (cinco o más descendientes y situaciones equiparables).
• Familia monoparental con dos hijos o más.
• Familia con un ascendiente o descendiente con una discapacidad reconocida superior al 33%.

¿Cuánto se puede deducir?

La cantidad que un solicitante puede deducirse es de 1.200 euros al mes en caso en todos los supuestos, menos en el caso de una familia numerosa especial en el que la cuantía deducida será de 2.400 euros.

Esta cantidad se puede percibir de dos maneras. Una, tras la declaración de la renta, en la que cada familia recibirá 1.200 euros (o 2.400 en su caso) más sumados a lo que Hacienda le devuelva. O bien, se puede percibir el abono anticipado mensual de 100 (o 200 euros) a través de varias maneras.

¿Cómo solicitarlo?

Para recibir el adelanto mensual, el solicitante debe rellenar el formulario 143 a través de internet teniendo un certificado digital, DNI electrónico o usuario y contraseña del sistema cl@ve. También se puede solicitar de manera presencial con cita previa en cualquier oficina de la Agencia Tributaria o por teléfono (901 200 345).

En cualquiera de los casos, habrá que disponer del título de familia numerosa o documento acreditativo de la discapacidad, el Alta en la Seguridad Social y cumplir con los períodos de cotización requeridos o bien cobro del paro o de una pensión, DNI y número IBAN de cuenta bancaria.

La deducción se puede solicitar en cualquier momento del año y no tendrá que renovarse salvo en casos de fallecimiento de la persona beneficiaria (cuando se reciba de manera mensual), cambios de residencia, baja o cambio de régimen en la Seguridad Social o mutualidad o renuncia al cobro anticipado.