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Una serpiente cascabel muerde a un hombre de 30 años

La víctima ha sido trasladada a planta tras permanecer desde el sábado por la tarde ingresada en la UCI del Hospital Virgen de la Salud de Toledo.

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Una serpiente cascabel muerde a un hombre de 30 años
Pierson Hill EFE

El pasado sábado una serpiente de cascabel sembró el pánico en La Puebla de Montalbán (Toledo) después de morder a un hombre de 30 años que tuvo que ser ingresado en la UCI. El 112 concretó que el suceso ocurrió a las 19:30 horas y que hasta el lugar donde se produjo se dirigieron los servicios sanitarios para atender a la víctima, que fue trasladado rápidamente en una ambulancia al Hospital Virgen de la Salud de Toledo, donde parmenece hospitalizado.

Fue la propia víctima quien llamó a emergencias para informar de que el ofidio le había mordido mientras paseaba por el campo a las afueras municipio y necesitaba urgentemente un antídoto, ya que la mordedura de este ejemplar puede ser mortal si no se trata rápido. Tras permanecer ingresado el fin de semana en estado grave, fuentes del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) han informado a Efe de que el hombre ya ha dejado la UCI y ha sido trasladado a una de las plantas del centro hospitalario.

La serpiente ha sido atropellada

La serpiente no ha corrido la misma suerte, ya que el domingo por la tarde fue encontrada muerta, aplastada por un coche en una carretera del municipio toledano. Concretamente, la Guardia Civil ha comunicado que el reptil se ha encontrado en el kilómetro 31 de la carretera autonómica CM-4009, dentro del término municipal de La Puebla de Montalbán, según ha revelado la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha.

Un dispositivo integrado por agentes de la Guardia Civil del puesto de La Puebla de Montalbán y del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) llevaba buscando al ofidio desde el sábado por la tarde, cuando recibió el aviso de la mordedura. Ahora investigan la procedencia de esta serpiente que habita el continente americano para ver si se ha escapado de algún recinto o, incluso, si pertenecía a la propia víctima.