Más de tres millones de mujeres en España no han cotizado lo suficiente como para tener derecho a una pasión por jubilación. Desde antes de muchos tener memoria, las ‘amas de casa’ -tarea a la que cada vez se unen más hombres- siempre han ejercicio un trabajo no remunerado, ni contributivo a la Seguridad Social, sin embargo, con una jornada ‘laboral’ de 24 horas, siempre pendiente de todas las tareas que requiera el hogar, así como los hijos u otros miembros de la unidad familiar.

Un trabajo de toda una vida que, dado a que no se cotiza en la Seguridad Social, generalmente no tienen derechos a las pensiones por jubilación. Una situación que incluso pueda causar un drama familiar con los años, debido a los pocos ingresos económicos para sobrevivir. Pues bien, desde ya, aquellas ‘amas de casa’ que cumplan una serie de requisitos podrá optar a una pensión de jubilación no contributiva.

Eso sí, será mínima, para cubrir las necesidades básicas de una persona que no ha cumplido el mínimo de cotización para una pensión menor. Se trata de unos 100,68 euros al mes.

Requisitos que se deben cumplir

Es una pensión mínima, pero incluso para optar a ella, las amas de casa tienen que cumplir una serie de requisitos mínimos para que se la concedan. Una serie de requisitos que incluso parecen exigentes para algunas unidades familiares.

Pero estos no serán los únicos requisitos que se deban cumplir. Para acceder a la pensión mínima también habrá que tener en cuenta una serie de indicativos por parte de la Seguridad Social para obtener esa pensión no contributiva. Y es que compartir domicilio podría variar las cantidades de pensiones:

Con esta pensión mínima, para 2021, se prevé un aumento del 0,9% de todas las pensiones del sistema español. Es decir, lo que fijará la pensión máxima en 402,72 euros al mes y una mínima de 100,68 euros. Además, otro factor determinante será si los solicitantes son padres o hijos en la unidad familiar, lo que podría provocar otra alteración en las cantidades de la pensión: