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Un extraño chorro azul saliendo desde la Tierra es captado por la Estación Espacial Internacional

Este fenómeno meteorológico es prácticamente imposible de divisar desde la superficie de nuestro planeta y los científicos explican que es poco frecuente.

Un extraño chorro azul saliendo desde la Tierra es captado por la Estación Espacial Internacional

Las cámaras de la Estación Espacial Internacional (ISS) han logrado captar un desde casi 400 km de altura un fenómeno excepcional y que rara vez puede vislumbrarse desde la superficie de la Tierra. Se trata de un brillante chorro de color azul que se impulsó hacia arriba desde las nubes de una tormenta.

Este rayo fue captado por las cámaras y fotómetros de la ISS por medio del experimento europeo ASIM (Atmosphere-Space Interactions Monitor). Estos relámpagos azules de trayectoria ascendente han sido divisados en otras ocasiones desde el espacio por los astronautas, pero resulta prácticamente imposible de descubrir desde La Tierra.

Esos rayos son capaces de llegar hasta 50 km de la estratosfera y tienen una duración de menos de un segundo. Según explican los científicos, el color azul de estos chorros o “Blues jets” se debe a que la luz que extraen proviene principalmente del nitrógeno estratosférico.

Este fenómeno se produce debido a una descarga eléctrica de corto alcance que tiene lugar en el interior de las nubes de la tormenta y que realiza las funciones de una chispa que activa estos destellos. El hallazgo ha sido publicado por la revista científica Nature.

Fenómeno muy poco común

Estos relámpagos azules han sido divisados por los científicos en ocasiones anteriores. En febrero de 2019 cinco de estas descargas fueron documentadas en una tormenta que se desarrolló sobre el Océano Pacífico, en las proximidades de la isla de Nauru. Así, en esa fecha, exactamente el día 26, la ISS consiguió captar uno de ellos.

Se trata de un fenómeno muy poco común que fue detectado por la NASA por primera vez entre 1994 y 1995 y que siguen siendo un misterio para los científicos, que aún no han logrado conocer los motivos y las condiciones necesarias para que se produzcan estos brillantes chorros de color azul.