Dos semanas después de perderse en la selva australiana, un hombre ha sido encontrado con vida. Se trata de Robert Weber, de 58 años, quien ha logrado sobrevivir gracias a una alimentación a base de setas y agua de presa, según ha indicado la policía de la localidad donde ha sido encontrado tras una exhaustiva búsqueda por os densos matorrales, ríos, presas y terrenos escarpados de la zona en condiciones de humedad.

Weber fue visto por última vez paseando con su perro, saliendo de un hotel de en Kilkivan, Queensland, el pasado 6 de enero. Desde entonces, la policía le ha buscado por la zona, incluso teniendo que suspender los trabajos de rastreo por una semana al no encontrarle. Ni a él ni a nada que pudiera dar a entender que el hombre se encontraba cerca del lugar donde desapareció. No fue hasta 18 días más tarde cuando Weber fue visto en la selva, cerca de la presa, por un propietario.

Tras su rescate, Robert Weber indicó al canal CNN 7News que se había perdido al tratar de evitar el tráfico, por lo que ya no pudo regresar: "Tenía que volver a casa esa noche. Iba a volver a casa alegremente. Había mucho tráfico, así que giré a la derecha, subí la montaña y bajé por el otro lado. Tomé la decisión de incorrecta en una fracción de segundo y pagué 18 días por ello”.

"Me desmayé, mi cuerpo no puedo soportarlo"

Según ha añadido la policía al medio, Weber se quedó ‘empantanado’, desorientado, en una carretera que el australiano no conocía, por la que decidió quedarse en su coche, junto a su perro, durante tres días, ante de quedarse sin agua. Después, tuvo que buscar una manera de sobrevivir, esperando que alguien acudiera a su rescate. "Salió a pie, se perdió y se quedó en una presa donde sobrevivió durmiendo en el suelo, bebiendo agua de la presa y comiendo setas", dijo la policía de Queensland en un comunicado.

“No tenía refugio. Me desmayé, mi cuerpo no pudo soportarlo. Esa fue la parte más dura”, indicaba Robert Weber que, tras su rescate, fue trasladado al hospital tras sufrir una exposición, aunque se encuentra “sano y salvo”. Pese a su rescate, el perro de Weber no fue encontrado y sigue en paradero desconocido.