La aparición de nuevas variantes del coronavirus tiene en alerta a la comunidad científica. Tras la detección de dos nuevas cepas con una capacidad de transmisión mayor que la original, como son la británica y la sudafricana, que ya han sido encontradas en decenas de países de todo el mundo, los expertos advierten que nuevas versiones del virus podrían surgir.

Los investigadores se encuentran estudiando ahora una tercera variante que ha tenido su origen en Brasil, concretamente en la ciudad amazónica de Manaos. Esta cepa posee una combinación de mutaciones entre las que se encuentran las E484Ky N501Y, dos tipos que han sido bautizados por algunos grupos de genetistas como Erik y Nelly, según informa El País y la revista científica Science.

La segunda de ellas ha sido hallada en las tres nuevas variantes del coronavirus y la mutación Erik, en la sudafricana y la brasileña. Los científicos advierten que estas mutaciones podrían ser la señal de que el virus podría estar transformándose en diferentes lugares del planeta hacia nuevas versiones con una capacidad de transmisión mayor.

Tanto la cepa británica como la sudafricana se han expandido de manera alarmante por multitud de países y la detectada en Brasil ha colapsado los hospitales de Manaos, donde cada día registran más pacientes contagiados por la enfermedad.

Preocupación entre los científicos

La OMS ya ha alertado que la pandemia está complicándose por la aparición de estas nuevas cepas y algunos expertos han apuntado a que la mutación E484K aumenta la capacidad del coronavirus para evitar los anticuerpos de plasma sanguíneo de los donantes que han superado la enfermedad. Además, las investigaciones señalan que la variante sudafricana es capaz de reinfectar a personas que ya contrajeron anteriormente el coronavirus.

Hasta el momento la variante británica ha sido detectada en 30 países y la sudafricana en unos 13. Por su parte, la cepa brasileña sólo ha sido identificada hasta ahora en Corea del Sur y Japón, además de en la nación sudamericana. No obstante, los expertos esperan que el impacto de estas nuevas variantes aumente con el paso de los meses.

En cualquier caso, los científicos estiman que las vacunas seguirán siendo efectivas ante estas variaciones, aunque podría ser necesario actualizarlas periódicamente para garantizar su plena eficacia. Asimismo, señalan la importancia de mantener la vigilancia por la posibilidad de que aparezcan nuevas mutaciones de la enfermedad.