El estado de salud de Trump es "muy preocupante" según fuentes de la Casa Blanca. 

Menos de 24 horas después de que se anunciara el positivo en COVID-19 de Donald Trump y su mujer, Melania, el presidente de Estados Unidos, ha sido ingresado en un hospital militar como “medida de prevención”. En plena campaña para las elecciones, el presidente permanecerá ingresado “durante varios días”, aunque desde la Casa Blanca insisten en que ambos tienen ‘síntomas leves’.

Desde este viernes, Trump ya recibe un tratamiento con el que combatir el coronavirus. Lejos de la inyección de lejía que llegó a plantear al inicio de la pandemia, el presidente de Estados Unidos ha recibido ya la primera dosis de su tratamiento. Se trata del Remdesivir, un antiviral que no necesita el suministro adicional de oxígeno, tal y como ha informado en un comunicado el médico de la Casa Blanca, Sean P. Conley.

"No necesita ningún suplemento de oxígeno, pero tras consultar a los especialistas, hemos elegido iniciar el tratamiento con remdesivir. Ha completado su primera dosis y está descansando cómodamente", ha trasmitido el médico de Trump, quien recomendó su traslado al hospital militar Walter Reed con la intención de llevar a cabo “una mayor vigilancia” del estado del presidente. El mismo Donald Trump ha comunicado en sus redes sociales que “lo está llevando muy bien”.

Fue en mayo cuando el presidente de Estados Unidos anunció que las autoridades sanitarias del país habían aprobado el uso del medicamento antiviral remdesivir para tratar a pacientes contagiados de coronavirus. Un tratamiento que aún es experimental, pero que la Agencia de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) aprobó al ver que los pacientes tratados con remdesivir presentaran una recuperación más rápida tras contagiarse de COVID-19.

Además, según recuerda la Agencia EFE, Trump recibió Remdesivir después de que se le adminitrase este viernes en la Casa Blanca una dosis de ocho gramos del cóctel experimiental de anticuerpos de la farmacéutica Regeneron. Se trata de una terapia de anticuerpos, tambien experimental, desarrollada para combatir el coronavirus en la primera etapa de la infección por la empresa de biotecnología Regeneron Phamarceuticals. Su objetivo es reducir los niveles de virus en el organismo, sin embargo, su uso generalizado no ha sido autorizado por la agencia estadounidense del medicamento, pero sí su uso puntual, estudiado caso por caso.

Trump se resiste a ceder el mandato

A pesar de su contagio por coronavirus, Donald Trump se resiste a ceder el mando. "El presidente sigue al mando" apuntan desde la Casa Blanca, que también se ha encargado de confirmar que el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, se encuentra en buen estado, por lo que seguirá con sus actos de campaña.

Por el momento, no está previsto que haya un traspaso de mandato al 'números dos' del presidente de los Estados Unidos tras su positivo en COVID-19, por lo que Trump seguirá al frente en sus funciones.