Situación complicada la que se vive en la Región de Murcia en los últimos días. Al regreso a la fase 1 de la localidad de Totana se le ha sumado la llegada de inmigrantes, algunos de ellos contagiados con coronavirus.

Según ABC, cerca de 400 inmigrantes han ido llegando durante los últimos días al puerto de Cartagena, en la zona de Palos y en el municipio de Águilas. Algunos, sin haberles podido realizar los test de COVID-19, se escapan, mientras que otros son destinados a una zona en la dársena de escombreras en el puerto de Cartagena.

En dicho lugar se les realiza los test, y en el caso de dar positivo son hospitalizados, pero a los negativos no se les exige cumplir con la cuarentena y algunos deambulan por la región, con el consiguiente riesgo que ello conlleva en estos momentos de pandemia.

Murcia apunta al Gobierno

La vicealcaldesa de Cartagena y responsables de los Servicios Sociales, Noelia Arroyo, reconoce que han tenido que actuar pese a que no es responsabilidad suya. "Estamos preocupados, no tenemos información oficial, no sabemos cuántos han llegado, cuántos se han escapado ni cuántos han dado positivo. El Ayuntamiento ha tenido que intervenir en casos de fugas localizadas", asegura en ABC.

Una crítica al gobierno central, pues considera que "no hay coordinación, estamos al margen. Hay que informar a los ayuntamientos porque es un problema que nos afecta a nosotros".