Monumental pelea a golpes entre jóvenes gallegos y madrileños que se reprochan llevar "el virus"
La madrugada del domingo, en Vilagarcía de Arousa, Pontevedra, tuvo lugar una trifulca entre jóvenes locales y madrileños en una zona de ocio nocturno.
En la madrugada del pasado domingo tuvo lugar en Vilagarcía de Arousa, en la comarca de Salnés (Pontevedra), un lugar conocido por ser segunda residencia de muchos ciudadanos madrileños, una pelea entre una treintena de jóvenes gallegos y madrileños que se debió a una discusión acerca del coronavirus.
Según fuentes policiales, se trata de una pelea que sucede "todos los fines de semana", por lo que resulta poco relevante para ellos. Además, han informado al diario ABC de que los hechos ocurrieron a causa de unas palabras que lanzaron los locales a los jóvenes del municipio madrileño de Getafe, a los que calificaban de haber traído consigo a la COVID-19 a causa del contraste de incidencia entre la Comunidad de Madrid y Galicia. La versión de los madrileños, los jóvenes locales les instaban a que "se fueran".
Los medios locales como el Diario de Arousa apuntan a que, según varios testigos, todo comienza cuando a uno de los dos grupos se les prohibió la entrada a uno de los locales -que estaba incumpliendo los horarios a pesar de las restricciones-.
Y, a partir de ahí, fue entonces cuando ambos grupos llegaron a las manos, lanzándose piedras y dejando varios heridos. Aparecieron entonces la Policía Nacional y el cuerpo local para intervenir y detener la pelea.
11 identificados y tres denuncias
Según ha informado la Policía Nacional al diario ABC, se han identificado a 11 personas que estuvieron implicadas en la reyerta, además de contar con tres denuncias presentadas.
Este lunes están citadas a declarar varias personas implicadas en el acto. Entre ellos, el portero de uno de los locales de la zona, y quien medió entre ambos bandos después del intercambio de golpes.
Los locales de ocio nocturno preocupan a la Xunta
El recién elegido presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, recordaba el pasado viernes que: "El problema es que en el ocio nocturno la gente que acude, con carácter general, es gente joven y sana, probablemente asintomática o que tenga síntomas leves, genete sana, que se siente fuerte", señalando además que "no es una broma", pues estos pueden mantener contacto con personas vulnerables con quienes convivan y poner en riesgo sus vidas.