Coronavirus

Descubren coágulos de sangre en casi todos los órganos de los muertos por COVID-19

Las autopsias revelan la formación de coágulos, que pueden causar insuficiencia renal, inflamación del corazón y complicaciones del sistema inmunológico.

Saber cómo afecta el coronavirus al organismo de una persona que ha superado el coronavirus es clave. Por ello, las autopsias de los pacientes que han perdido la vida por la COVID-19 están ayudando para comprender mejor cómo actúa la enfermedad en el cuerpo. Las últimas revelaciones mostraron que algunos pacientes desarrollaron coágulos de sangre no solo en los pulmones, sino en “casi todos los órganos”.

Según ha explicado la presidenta del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York, la doctora Amy Rapkiewick, estos nuevo hallazgos son “dramáticos”, porque ahora se ha descubierto que el virus también puede causar coágulos de sangre, no solamente una patología respiratoria como la neumonía. Los coágulos de sangre pueden causar problemas serios como apoplejías, insuficiencia renal, inflamación del corazón y complicaciones del sistema inmunológico.

El estudio indica que el exceso de coágulos sanguíneos suele ocurrir en los vasos sanguíneos grandes, en los pulmones, el corazón, el cerebro y la piel, pero también pueden afectar a los vasos sanguíneos más pequeños. “Esto fue dramático, porque lo esperábamos en los pulmones, pero también lo encontramos en casi todos los órganos que vimos en las autopsias del estudio”, afirma Rapkiewick a la CNN.

Aparición de grandes células de la médula ósea

Las autopsias también han señalado la notable aparición de grandes células de la médula ósea llamadas megacariocitos, que según los autores, “normalmente no circulan fuera de los huesos y los pulmones”. Se observaron en el corazón, los riñones, el hígado y otros órganos. Ahora, las investigaciones se centrarán en determinar la conexión, si es que existe, entre las grandes células de la médula ósea y los coágulos de sangre. La intención es conocer si influyen en esa coagulación.

Los doctores se han encontrado con una sorpresa más. Pensaban que el virus provocaría inflamación en el corazón con miocarditis, pero las autopsias practicadas no han encontrado una gran incidencia. Todo este conocimiento, sin duda, ayudará a los investigadores a seguir conociendo una enfermedad, la de la COVID-19, nueva para todos y de la que cada día se descubre una cosa nueva.