Este lunes alrededor de 41.000 estudiantes de Madrid comienzan la Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU) con una convocatoria atípica por la pandemia de la COVID-19. Será la primera generación que tendrá que hacer frente a los exámenes con mascarilla, sin poder compartir material y sin quedarse en el campus después de haber acabado la prueba. Además, por primera vez los exámenes durarán cuatro días, en lugar de tres. Se extenderán el lunes, martes, miércoles y jueves, 6, 7, 8 y 9 de julio y tendrá una entrada escalonada.

Por otra parte, se ha incrementado notablemente el número de alumnos con respecto al año pasado. Habrá un 22% más de estudiantes, lo que supone alrededor de 8.000 aspirantes más a la universidad. En la Universidad Complutense de Madrid se examinarán 13.883 alumnos (+20,19 %), en la Universidad Carlos III otros 5.680 (+24,73 %), 10.893 en la Universidad Autónoma de Madrid (+18,87 %), en la Universidad de Alcalá de Henares 5.297 (+29,86 %), otros 3.975 en la Universidad Rey Juan Carlos (+26,15 %), y finalmente en la Universidad Politécnica se examinarán 1.586 estudiantes (+25,77 %).

Estos alumnos tendrán que hacer un esfuerzo extra para controlar los nervios habituales por los exámenes con el fin de que no se les olvide ninguna de las medidas de seguridad que deben llevar a cabo.

Mascarillas y material

Uno de los puntos principales para la prueba de este año es que los estudiantes madrileños deberán llevar mascarilla durante toda la prueba, aconsejándose emplear una diferente en cada examen. Además, deberán llevar su propio gel desinfectante para lavarse las manos regularmente. Quien olvide alguno de estos dos elementos podrá solicitarlo en los puntos de información habilitados por la universidad.

Cada alumno deberá, además, llevar en una mochila pequeña su propia botella de agua, alimentos y material, pues no podrá compartir nada con el resto. La mochila deberá estar cerrada antes del de entrar al aula.

Restricciones en los campus

Se acabó pasar el día en la universidad repasando para los diferentes exámenes o comentar con los compañeros las respuestas. Las pautas de seguridad establecen que solo se podrá acceder al campus para realizar las pruebas de cada materia y en la franja horaria que les corresponda. Los exámenes del lunes y el martes comenzarán con un llamamiento a las 8:30, mientras que el resto de días, el llamamiento se realizará media hora antes del inicio del examen.

Los estudiantes deberán llegar a la universidad, al menos, una hora antes del llamamiento para evitar aglomeraciones y la entrada se llevará a cabo de forma ordenada y guardando la distancia de seguridad. Al finalizar el examen no se pueden levantar, sino que deben alzar la mano para indicar que han finalizado la prueba y que el profesor les indique cómo entregarlo para poder salir. Tras cada examen, aquellos que no tengan pruebas seguidas deberán abandonar el campus.

En caso de que algún estudiante presente síntomas se le llevará a un espacio separado, avisando al profesor de apoyo, la familia y los servicios médicos.

División por ramas

Los exámenes realizarán durante cuatro días, dejando el viernes para posibles incidencias o exámenes que no haya podido realizar cualquier alumno.

De esta manera, el lunes los estudiantes se examinarán de las asignaturas de la rama de Ciencias, mientras que el martes se realizarán los exámenes de las asignaturas troncales de los estudiantes de la rama de Letras. El miércoles y el jueves será el turno de las opcionales, que también estarán divididas en ramas. Primero se realizarán los exámenes de Matemáticas, Griego, Artes Escénicas, Filosofía, Física, Cultura Audiovisual, Economía, Geología y Diseños. El jueves, los alumnos se examinarán de Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales, Arte, Latín, Geografía, Biología, Dibujo Técnico, Química, Historia del Arte, o Lengua Extranjera Adicional.

Exámenes más flexibles

La complicada situación vivida en España ha provocado que los exámenes sean algo más flexibles para facilitar las cosas a los estudiantes. Por primera vez, se podrán mezclar preguntas de los dos bloques de opción, A y B. Esta medida busca asegurar la equidad y que el alumnado no se vea perjudicado por no haber podido tratar en clase algunos contenidos, ya que el confinamiento obligó a la enseñanza a distancia y condicionó la cantidad de materia abordada. El modelo de prueba no se alejará de los formatos que las universidades han puesto a disposición del alumnado y el profesorado para el curso.

Transporte y seguridad

Para evitar colas y aglomeraciones durante el traslado de los estudiantes a las universidades, el Consorcio Regional de Transportes incrementará la oferta en hora punta. Se reforzará especialmente el servicio en los horarios de comienzo y final de los exámenes en tres líneas de Metro, una línea de Metro Ligero, 15 líneas de autobuses de EMT, tres líneas de trenes de Cercanías y 47 líneas de autobuses interurbanos.

En concreto, se reforzarán las líneas 6 (que da acceso a las Universidades Complutense y Politécnica) y 12 (Rey Juan Carlos y Carlos III) del suburbano. La EMT reactivará también las tres líneas específicas (F, G y U) que suministran servicio en el campus de Ciudad Universitaria, así como las líneas 46, 82, 83, 132, 133, 160, 161 y 162 y las líneas A y H, que conectan con el campus de Somosaguas. En total, estas trece líneas suman 165 autobuses, que contarán con inspectores en la calle para informar y resolver cualquier incidencia o, si es necesario incorporar más vehículos a alguna línea.

También se reforzarán los autobuses interurbanos: 37 líneas interurbanas y 10 líneas urbanas de los municipios donde están situados los campus. Esta decena de líneas (714, 827,227, 631, 633, 519A, 522, L1A Alcalá, L1B Alcalá y L2 Alcalá) que transportan a las sedes de la EvAU de forma directa incrementará el servicio para igualar la oferta de los días universitarios lectivos. En tres de ellas (227, 714 y L2 Alcalá), se pondrán servicios especiales tipo lanzadera, directos a la universidad, en los horarios de entrada y salida de los exámenes. El plan de Cercanías es aumentar la frecuencia de paso de las líneas C4, C2, C5 y C8.

Por otro lado, se realizará un seguimiento mediante cámaras de los flujos de viajeros y del estado de los andenes de toda la red regional, donde también se desplegarán más vigilantes para asegurar el cumplimiento de las medidas de higiene.

Por último, la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 desplegará a 2.500 voluntarios de Protección Civil, Samur y Policías Locales, que tendrán la misión de evitar aglomeraciones y reducir así en la medida de lo posible el riesgo de contagio.