CORONAVIRUS

Me siguen pagando el ERTE y estoy trabajando: ¿tengo que devolver el dinero?

Los sindicatos recomiendan a estas personas que no gasten ese capital, puesto que el SEPE les reclamará su reintegro mediante un requerimiento.

Me siguen pagando el ERTE y estoy trabajando: ¿tengo que devolver el dinero?

Uno de los últimos problemas que han advertido los trabajadores del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) está relacionado con los trabajadores que se reincorporan a la actividad tras estar incluidos en un ERTE. Debido a que desde el SEPE no se les ha tramitado la baja, estos empleados están recibiendo las prestaciones igualmente.

Muchos sindicatos han comenzado a recibir consultas de los beneficiarios, que han vuelto a su puesto de trabajo y han seguido cobrando la ayuda con normalidad. Otro de los fallos detectados está relacionado con empleados que se han reincorporado parcialmente, pero que siguen cobrando como en los meses anteriores.

Más de 700.000 vueltas

En las últimas semanas, los funcionarios del SEPE han tramitado la vuelta de 700.000 trabajadores que estaban en ERTE. Pero no acaba ahí, puesto que según Manuel Galdeano, coordinador nacional del sindicato CSIF en el organismo público, todavía quedan unos 400.000 expedientes por tramitar.

Devolver el dinero

Desde los sindicatos están recomendado a estos trabajadores "beneficiarios" que no gasten ese dinero, puesto que el SEPE les reclamará su devolución mediante un requerimiento. No se trata de una decisión nueva, sino que ésta ya venía recogida en la guía sobre los ERTE publicada en la web oficial.

Sin cobrar

Otro problema derivado de la reincorporación a la actividad es la de aquellos empleados que dejan de cobrar las prestaciones por una rebaja en la reducción de jornada o en la suspensión del contrato. Se debe a un error informático, que ya han comunicado los funcionarios a la Dirección General del SEPE.

Los ERTE de fuerza mayor que surgieron por la crisis sanitaria tienen unas características diferentes a los tradicionales de causas económicas, organizativas, técnicas o de producción. Así, algunas de estas particularidades no están incorporadas al programa informático que utiliza el organismo, por lo que surgen problemas imprevistos como éste.