Tras el confinamiento y el estado de alarma hemos vuelto a ver terrazas de bares llenas de fumadores y lugares de ocio donde las conocidas cachimbas o pipas de agua se han vuelto protagonistas entre los jóvenes españoles. Pero esto no es tan divertido cuando nos alertan de que el consumo de estos productos puede triplicar el contagio por Coronavirus o empeorar el pronóstico en caso de personas ya infectadas.

Así nos lo ha hecho saber la Comisión Asesora COVID-19, puesta en marcha por el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (Cgcom), en su quinto informe sobre tabaco y la COVID-19, en el que han participado la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (Sespas), la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) y el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT).

De esta manera, los médicos nos hablan de que esa probabilidad de contagio aumenta por el contacto boca a boca de las boquillas de dichos productos, la limpieza de los mismos, así como por el humo exhalado o la proximidad a los fumadores.

El tabaco y la hostelería

En cuanto a su limpieza, este quinto informe alerta también a las personas encargadas de su manipulación como son los hosteleros ya que están en continuo contacto con todo tipo de artículos relacionados con el tabaco así como con los fumadores.

Es por ello que este nuevo informe ruega a los poderes públicos cambios necesarios en las políticas antitabaco debido a la nueva situación creada por la COVID-19 y solicita así ampliar los espacios sin humo, sobre todo aquellos más frecuentados por menores como son las playas o piscinas. Asimismo, la Comisión Asesora COVID-19 recomienda no consumir ninguno de estos productos aunque esté permitido por la ley.