10 millones de casos por coronavirus. Esa es la cifra a la que estima llegar la Organización Mundial de la Salud (OMS), tal y como confirmó en conferencia de prensa su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus: "Esperamos alcanzar un total de 10 millones de casos en la próxima semana".

Para corroborar el avance de la pandemia, el dirigente ha recordado que ya se han notificado 9,1 millones de contagios y más de 470.000 muertes, además de advertir que si durante el primer mes se detectaron menos de 10.000 casos, en el último se han diagnosticado casi 4 millones.

Por ello, recomendó que "incluso mientras continuamos con la investigación en vacunas y terapias, tenemos la urgente responsabilidad de hacer todo lo que podamos para suprimir la transmisión y salvar vidas".

Compra de oxígeno

Con el fin de evitar más muertes, Adhanom informó que una de las medidas más efectivas es proporcionar oxígeno a los pacientes graves o críticos, puesto que si no se suministra, el virus priva a las células y a los órganos del oxígeno que necesitan, incrementando así las probabilidades de muerte.

"Las conversaciones en curso con los proveedores en las últimas semanas han permitido a la OMS comprar suministradores de oxígeno, que se enviarán a 120 países en las próximas semanas. La OMS ha identificado otros 170.000 aparatos que pueden estar disponibles en los próximos seis meses, con un valor de 100 millones dólares", reveló.

La situación en América

Actualmente, América se ha convertido en el principal foco a nivel mundial. Michael J. Ryan, director ejecutivo de la OMS, declaró que "la epidemia en América es intensa en este momento. Hemos visto tendencias preocupantes. Muchos países sufren una alta transmisión comunitaria. No están llegando a bajos niveles de transmisión necesarios para conseguir una salida sostenible de la crisis. Diría que la situación sigue evolucionando, aún no han llegado a su pico".

Según Maria Van Kerkhove, responsable de enfermedades emergentes y zoonosis de la OMS, uno de los principales motivos podría deberse a que "en muchos lugares están entrando en la temporada de gripe, lo que hará la situación todavía más difícil y por eso cobran importancia los sistemas de vigilancia. Es muy difícil hacer un resumen de una región tan grande y diversa".

Respecto a la preocupante situación de Brasil, Ryan afirmó que "es muy difícil predecir picos. El virus no actúa solo, sino que explota las debilidades del sistema, explota la falta de educación y falta de atención a las comunidades. Los números responden a la respuesta, no hay magia ni hechizos, tenemos que actuar a todos los niveles. Mira a los países que han tomado acciones y contenido la enfermedad y encontrarás la respuesta".