El coronavirus rompió esquemas en cuestión de días. La crisis sanitaria cambió de un día para otro los hábitos laborales de millones de españoles. Los sectores que viven de la atención al público van recobrando su actividad. El 85% del comercio y el 30% del sector de la restauración ya han abierto, según datos de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA). Pero donde la actividad presencial no es un factor diferencial, la nueva normalidad dibuja un panorama con impulso del teletrabajo y oficinas con un ambiente distinto.

Poco más de 1,6 millones de españoles (el 8,3% de los ocupados) trabajó en su domicilio al menos un día durante el año 2019, aunque más de 6 millones (el 30,6%) tenían esa posibilidad, según la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE). Pese a que el porcentaje se ha duplicado desde 2006, España aún está lejos de socios europeos como Países Bajos, donde llega al 14%. Sin embargo, el teletrabajo masivo ha permitido mantener la actividad en muchas compañías. En una reciente encuesta del Banco de España, más del 75% de las empresas afirman que el teletrabajo ha sido una estrategia relevante o muy relevante para afrontar la crisis.

El confinamiento ha dejado en sus casas a las más de 27.000 personas que tienen su puesto de trabajo en el madrileño complejo de AZCA, cerca del Bernabéu. La cultura del teletrabajo "ha facilitado mucho el proceso de adaptación a las nuevas circunstancias, en las que todos hemos estado trabajando desde casa al cien por cien", señalan a AS desde Solunion, cuya sede está en uno de los edificios de AZCA. Esta aseguradora de crédito lleva más de un año ofreciendo a su medio millar de empleados la opción de teletrabajo dos días a la semana.

Sanidad aún incide en la Fase 3 en fomentar el teletrabajo para todos aquellos trabajadores que puedan realizar su actividad laboral a distancia, pero ya insta a elaborar protocolos de reincorporación presencial a la actividad laboral.

"La vuelta a las oficinas va a ser gradual, estará marcada por la situación del virus y las normas sanitarias", comenta a AS José María Álvarez, presidente de la Asociación Española de Oficinas (AEO). La entidad ha editado un documento con criterios, protocolos y buenas prácticas para la vuelta a las oficinas. Estima que para mantener la distancia de seguridad de dos metros el aforo máximo tendrá que reducirse a entre un 30% y un 50%, además de limitar el uso de zonas comunes. Pese al auge del teletrabajo, Álvarez recalca su optimismo en el empleo presencial cuando se supere la crisis sanitaria. "El hombre es un ser social y le gusta relacionarse. Ahora hay que ser muy prudentes, pero esto no va a ser para siempre", opina. "En Estados Unidos solo el 12% está de acuerdo en hacer teletrabajo todos los días. Es una herramienta que ha venido a arreglar la situación, pero eso no significa que se acaben los espacios físicos".

En un sondeo de la consultora PwC entre 871 directivos de 24 países, el 49% dijo que su compañía podría recuperar la normalidad en menos de tres meses cuando acabe la pandemia.