China continúa avanzando en su nueva normalidad y prueba de ello es que desde este domingo ya no es obligatorio el uso de mascarilla en los lugares públicos de Pekín. El Centro de Prevención y Control de Enfermedades de la capital del país asiático ha decidido suspender esta norma, que estaba vigente desde enero, tras dar por controlada la pandemia.

Sin embargo, permanece la obligatoriedad de mantener las distancias de seguridad entre los ciudadanos para evitar posibles riesgos de rebrotes. En estos momentos en China hay 86 enfermos de coronavirus activos, diez de ellos en estado grave, según los datos que la Comisión Nacional de Sanidad ha revelado durante la jornada de hoy.

Uso voluntario desde ahora

El uso de mascarilla es algo habitual en los países asiáticos, por lo que a buen seguro aún se seguirá viendo a personas luciendo esta prenda en los espacios abiertos de Pekín. Pero ahora la elección de llevarla será voluntaria, a diferencia de lo que ha sucedido en los últimos meses. Sin ella no estaba permitida la entrada en los comercios y las fuerzas de seguridad chinas vigilaban que se cumpliese escrupulosamente la norma en todo momento.

Pekín, que acumula varias semanas sin detectar nuevos casos positivos de coronavirus entre sus ciudadanos, celebrará la próxima semana la sesión anual de la Asamblea Nacional Popular china. El país asiático ha contabilizado oficialmente 82.947 infectados y 4.634 muertes desde la aparición de la enfermedad en Wuhan el pasado mes de diciembre.