Acudir a trabajar estando enfermo por coronavirus puede acarrear una sanción. Y es que el exceso de celo profesional puede suponer un grave riesgo para el resto de personas con las que se trata. En una situación así se ha encontrado el director de un centro de mayores en Móstoles que acudió a su puesto de trabajo tras dar positivo por la COVID-19.

En concreto, el hecho tuvo lugar en la residencia Parque de Coimbra de esta localidad madrileña, institución gestionada por la Asociación Dorada Mensajeros de la Paz. El trabajador ha sido sancionado con una suspensión de 15 días de empleo y sueldo después de que el pasado 30 de marzo fuera multado por la Policía Nacional por acudir a realizar su labor profesional estando contagiado por el coronavirus.

"Exceso de responsabilidad"

A este individuo se le abrió un expediente por una falta muy grave y se decidió la sanción, que cumplirá en los primeros quince días de agosto, tras tener en cuenta las alegaciones que presentó en su defensa. En este sentido, el director de la residencia aseguró que su error se produjo “por un exceso de responsabilidad”. Asimismo, se valoró que empleó medidas de seguridad para evitar infectar a las demás personas que se encontraban en el recinto.

Según recoge Europa Press, la Asociación Dorada Mensajeros de la Paz "no duda de su buena fe y que sus intenciones eran las mejores". No obstante, admite que "se produjo un incumplimiento o abandono de las normas y medidas establecidas de seguridad y salud en el puesto de trabajo" por parte de esta persona.