El coronavirus será el gran protagonista de 2020. El virus, que tuvo su primer caso en China en noviembre, se ha expandido por todo el mundo y, actualmente, hay 2 millones de casos confirmados con 121.726 muertes. Sin embargo, hay un país que ha logrado controlarlo de manera muy efectiva y se ha convertido en el dolor de cabeza de la OMS.

Taiwán es una isla que se encuentra a apenas 180 kilómetros al este de China. Precisamente es con el que país con el que más disputas tiene. El gigante asiático no reconoce a la isla como estado independiente, sino como una provincia. No obstante, a diferencia de China, Taiwán sí ha conseguido controlar el virus que se convirtió en pandemia: 393 contagios y 6 muertes desde que apareciera el primer caso el 22 de enero.

Oídos sordos de la OMS a Taiwán

La Organización Mundial de la Salud ha sido siempre muy escéptica a la hora de tratar el desarrollo de la COVID-19 en Taiwán. Bruce Aylward, subdirector general de la organización, fue puesto en apuros en una entrevista en la televisión RTHK de Hong Kong. Fue preguntado por la gestión del país asiático y rehusó responder y eventualmente terminó colgando la videollamada. Ante un nuevo intento de su entrevistadora, terminó respondiendo: "Ya hemos hablado de China".

A todo ello hay que sumar la revelación realizada por el gobierno de Taiwán durante las últimas horas. Según ha publicado en su sitio web, el país asiático alertó a la OMS el pasado mes de diciembre sobre la propagación del virus en Wuhan. Tedros Andhanom, presidente de la OMS, rechazó esas afirmaciones. Además de ello, Taiwán no forma parte de la OMS por presiones de China, que no reconoce su soberanía.

Ampliar

La contención de Taiwán con el virus

El primer caso positivo por coronavirus apareció el 22 de enero. Hasta el 1 de marzo apenas crecieron hasta los 40 y fue, precisamente, en ese mes cuando más aumentaron los contagios. Según cifras oficiales, más del 70% de los contagios han sido importados, lo que hace todavía más eficiente la contención del virus.

A 14 de abril, el país asiático únicamente cuenta con 385 casos confirmados y seis muertes a pesar de estar a menos de 200 kilómetros de China y cerca de la provincia de Hubei, zona cero del coronavirus que ha estado confinada durante casi tres meses. Taiwán contabiliza 16,5 casos por cada millón de habitantes y apenas 0,25 muertes por millón de personas. Es el segundo país del mundo, detrás de El Salvador, que menor porcentaje de fallecimientos tiene y el que mejor ha controlado la pandemia según diferentes estudios.

¿De qué manera ha contenido Taiwán la COVID-19?

La pandemia ha azotado al mundo y ha causado más de 100.000 muertes y más de dos millones de casos confirmados. Estados Unidos, España e Italia están siendo los países más afectados. Pero, ¿cómo es posible que un país con 23 millones de habitantes, colindante con China, haya conseguido frenar al coronavirus? Una pregunta interesante, con muchas ramas y compleja de responder.

En primer lugar, Taiwán se ha apoyado en una vigilancia y concienciación temprana, medidas duras desde el primer momento y, lo más sorprendente, la utilización de aplicaciones de big data y grandes plataformas online con un buen resultado. Tan sólo el 0,000014% de la población ha sido contagiada por el coronavirus.

El dato más sorprendente y que más llama la atención es que Taiwán es el país que mayor número de pruebas negativas tiene por caso confirmado. Un positivo por cada 122 pruebas realizadas, mientras que gigantes como el Reino Unido y Estados Unidos tienen un positivo por cada 3,4 pruebas y un positivo por cada 5,3, respectivamente.

Según Our World In Data, el mejor indicador para comprender la propagación del virus es el mencionado anteriormente. El Reino Unido ha realizado más pruebas que Taiwán y, sin embargo, ha obtenido 60 veces más casos confirmados (1.035 por 16 casos por millón de habitantes). Lo que resuelve que, a pesar que las pruebas relativas al tamaño de la población son mayores en las islas, las pruebas relativas al tamaño del brote son mucho más altas y significativas en el país asiático.

¿Hasta qué punto es un indicador válido? Es manifiesto que un país que realiza muy pocas pruebas por cada caso confirmado no está haciendo pruebas lo suficientemente amplias para conocer la verdadera propagación del virus. Y eso es lo que está sucediendo en la mayoría de países, que solo analizan a las personas con síntomas graves, escapando de su estudio personas con síntomas leves o asintomáticos.

A pesar de que es complejo poder realizar un estudio tan completo, países como España, Italia, Reino Unido o Estados Unidos tienen un nivel de pruebas muy escaso en relación al tamaño del brote. Por ello es más que probable que el número real de infectados sea desorbitadamente más alto que los casos confirmados. Taiwán y Australia (1 positivo por cada 50 pruebas) ofrecen una imagen más fiable de la verdadera incidencia del coronavirus en su país.

El alcance limitado de pruebas en países gigantes y con grandes brotes es uno de los principales impedimentos para tener estudios completos. Un grupo de investigadores de la London School of Hygiene and Tropical Medicine han añadido que cuando el número de casos contabilizados parece bajo en comparación al número real de muertes, ese país tiene un número real de casos mucho más alto.