CORONAVIRUS
Así afecta la crisis del coronavirus a los más vulnerables
ONU y las ONG advierten que las medidas para frenar el avance del Covid-19 no deben olvidar a refugiados, migrantes y niños, entre otros colectivos.
"Ninguna parte de nuestras sociedades puede ser ignorada si queremos enfrentar efectivamente este desafío global", advierten en una declaración conjunta Michelle Bachelet y Filippo Grandi, los dos Altos Comisionados de la ONU para los Derechos Humanos y Refugiados. Mientras, las ONG temen que las medidas que se están tomando para frenar el avance del coronavirus dejen de lado a aquellos colectivos que ya requerían de ayuda antes del inicio de esta crisis, complicando todavía más sus vidas.
Refugiados, migrantes, niños y niñas sin acceso a las escuelas, víctimas de violencia... Los expertos aseguran que es necesario el apoyo internacional para intensificar los servicios e incluir a estos colectivos en los acuerdos nacionales de prevención, vigilancia y respuesta. "El mensaje más importante es tratar a las personas con dignidad y recordar que el pleno respeto por sus derechos humanos no cambia bajo estas circunstancias", apunta Joel Millman, portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones, desde el portal de noticias de la ONU.
Los refugiados, ante la crisis del coronavirus
Según los últimos datos del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), hay 25’9 millones de refugiados en el mundo. Mientras la pandemia del coronavirus avanza, los conflictos armados no cesan y hay personas que siguen huyendo de sus hogares, buscando un lugar seguro día tras día. El cierre de fronteras decretado por buena parte de países europeos y del resto del mundo puede afectar a quienes tratan de escapar e incluso bloquear por completo el derecho a solicitar asilo.
Además, el no acceso al sistema sanitario y la inexistencia de medidas de prevención ante la posible llegada del coronavirus a los campos de refugiados también convierten a estas personas en un colectivo todavía más vulnerable en estos tiempos de crisis. A eso, hay que sumar que en estos campos, en los que viven millones de personas, cuentan con instalaciones de higiene y saneamiento muy escasas.
Antonio, médico desplazado hasta Lesbos, donde está el campo de refugiados de Moria (con 20.000 personas) cuenta a AS cómo es la situación allí: "Hay gente con patologías y viven en unas condiciones de salubridad nulas y hacinamiento extremo. Si llegara el coronavirus no habría manera de atenderlos y tendría una mortalidad bastante elevada". La periodista Irene Redondo, también desde la isla griega, señala que no habría capacidad de respuesta política y que se ha dejado a los refugiados en una "situación de aislamiento peligrosa".
Ambos coinciden en que "la única solución" pasa por evacuar a estas personas. Así lo ha pedido también Médicos Sin Fronteras y el eurodiputado español López Aguilar (PSOE), por medio de una carta a la Comisión Europea, en nombre de la comisión de Libertades del propio europarlamento.
La población migrante, también más afectada
Desde la Organización Internacional para las Migraciones vienen advirtiendo que las medidas tomadas para frenar el avance del Covid-19 están afectando especialmente a los migrantes de todo el mundo. Los que más lo sufren, apuntan, son los que trabajan en el sector de la restauración, la construcción y otros oficios que tradicionalmente desempeñan los migrantes en Norteamérica y Europa.
Las consecuencias no son sólo económicas, sino que también tienen que ver con la salud, especialmente en aquellos países, como Estados Unidos, en los que no está asegurado el acceso universal a la sanidad pública. Garantizar a los migrantes la atención sanitaria, apuntan desde la organización, es crucial para contener la propagación del coronavirus.
Niños y niñas sin acceso a escuelas
Los más pequeños son otro de los colectivos más vulnerables que se pueden ver especialmente afectados durante esta crisis del coronavirus. El cierre de colegios es una de las medidas de prevención más adoptadas a nivel mundial. La escuela, un entorno seguro, deja de estar disponible como espacio para aquellos niños y niñas que están expuestos a situaciones de violencia o abuso en el hogar.
Por otro lado, esta clausura de colegios viene acompañada de una suspensión de las comidas escolares. En España, algunas comunidades autónomas ya han tomado medidas en este aspecto: Canarias va a hacer llegar una compra por valor de 120 euros a aquellos alumnos de comedor a 'cuota cero', Valencia concede vales de 60 euros para la compra gratuita en supermercados, la Comunidad de Madrid ha recurrido a Telepizza y Rodilla...
Víctimas de violencia de género
También entre las medidas más tomadas por los países para frenar el coronavirus está la cuarentena. El confinamiento en el hogar deja a las mujeres que sufren violencia de género en una situación de mayor exposición ante su agresor.
Desde el Ministerio de Igualdad del Gobierno de España se ha puesto en marcha un Plan de Contingencia que declara esenciales los servicios de asistencia integral a las víctimas, habilitando, además, un chat de Whatsapp para ayuda psicológica. "Ellas viven una doble amenaza, que es la amenaza de la violencia machista y la amenazada del virus", ha recordado Pedro Sánchez en sus comparecencias.
Las personas mayores y las residencias, en el foco
Un estudio publicado en el boletín del Centro para el Control de Enfermedades de China concluye que el coronavirus se presenta en un 80'9% de la población como leve, un 13'8%, grave, y un 4'7% como crítico. Las personas de mayor riesgo, apunta, son las mayores de 80 años, con una mortalidad del 14'8%, cifra que aumenta si se miran los casos de Italia o España.
En el país transalpino, la mortalidad ronda el 23% en las edades comprendidas entre los 70 y 80 años. En España, según ha desvelado el Ministerio de Sanidad, la cifra está en un 17'9% en las personas mayores de 80 años. Además, los datos publicados por el mismo organismo revelan que el 67% de las personas fallecidas con coronavirus superaban esta edad. Las residencias de ancianos están siendo uno de los focos de contagios y el Gobierno ha intervenido también estos centros de carácter privado.