CORONAVIRUS

Coronavirus: ¿están abiertos los dentistas y las clínicas dentales en el estado de alarma?

El MInisterio de Sanidad ha establecido que el normal funcionamiento debe suspenderse, aunque permite a las empresas atender casos de urgencia.

Un dentista con una paciente.

¿Puedo acudir al dentista durante el estado de alarma? La pregunta nada en una de las muchas zonas grises con que cuenta el decreto firmado el pasado 14 de marzo, que ha establecido el confinamiento de la sociedad española. El decreto establece excepciones a la hora de salir a la calle, como son urgencias médicas, acudir al trabajo si la presencia física en el puesto es ineludible, la compra de alimentos y fármacos, el paseo de mascotas, etc. El caso de los dentistas, sin embargo, no ha quedado del todo establecido, aunque podría entrar dentro del apartado de urgencias de carácter sanitario. Así parece entenderlo el Ministerio de Sanidad.

El Ministerio ha suspendido el normal funcionamiento de las clínicas dentales, aunque se permite que atiendan casos de urgencia. La recomendación de los distintos colegios profesionales de cada región van en esa misma línea: se recomienda la atención de urgencias, aunque no se trata de una obligación. Tampoco es obligado el cierre, se trata de una recomendación, así que si precisa usted de tratamiento dental, el camino más corto será llamar a su clínica para ver si sigue funcionando de forma normal o sólo para casos de primera necesidad.

Una de las quejas principales que el sector está expresando desde que empezó el estado de alarma es su indefensión contra los contagios. No en vano, la actividad de los dentistas supone un riesgo importante en el caso del coronavirus: contacto cercano con el paciente, sin posibilidad de usar la mascarilla para realizar la exploración. "Preguntamos a los pacientes si han tenido síntomas en los días previos antes de venir y todos suelen decir que no. Pero nunca se sabe, estamos muy expuestos", comenta Lourdes, de la clínica Durident, en San Sebastián de los Reyes (Madrid), donde atienden sólo a casos de urgencia, a la espera de que la situación mejore.

Algunas clínicas han mantenido su normal funcionamiento para frenar el impacto económico, aunque eso ha provocado quejas de sus profesionales. El Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de la Primera Región, que representa a los dentistas de Ávila, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Madrid y Toledo, ha emitido un escrito en el que pide la paralización de la actividad normal de las clínicas ante los riesgos de contagio, agravados además por la ausencia de material médico (mascarillas, sobre todo) a raíz de la crisis sanitaria que vive España. La salud dental en su mayoría no está dentro de la cartera de servicios que incluye la Sanidad pública, a excepción de extracciones, flemones o traumatismos, con el añadido de que los hospitales se encuentran desbordados por los casos de COVID-19 y han decidido posponer todas las consultas no esenciales.

ERTEs en las clínicas dentales

Muchas clínicas, a sabiendas de que el tráfico de clientes decaerá mucho durante el estado de alarma, han tenido que tomar la decisión de realizar ERTEs (Expedientes de Regulación Temporal de Empleo) para aliviar el golpe económico. Además, los colegios profesionales recomiendan limitar la coincidencia de profesionales en las clínicas, escalonando los turnos, lo que ha limitado aún más la capacidad de acción de los pequeños negocios en este sentido.