La heroína del Congreso
Se llama Valentina Cepeda y lleva 29 años trabajando en el Congreso como limpiadora. Hoy ha sido ovacionada por un trabajo invisible que se convierte en imprescindible.
Enfundada en sus guantes, con la mascarilla tapando sus vías respiratorias, la trabajadora de limpieza de la Cámara deslizó una y otra vez su bayeta por el atril cada vez que el orador enfilaba de nuevo camino a su solitario escaño. Fue la imagen de much@s trabajadores que no pueden elegir. Que muchas veces no tienen sueldos dignos como los que estos días les toca cuidar de personas dependientes o mayores, auxiliares de residencias, farmaceúticos, limpiadoras de espacios públicos y empresas privadas, transportistas, trabajadores de supermercados, farmacias... Fue el vivo retrato de la sociedad española que está sacando adelante esta crisis y por las que los españoles salimos a los balcones para homenajear, no sólo a los sanitarios (los otros grandes héroes), sino a personas como Valentina.