Evitar la caída del cabello es algo complicado, no es imposible, aunque hay veces que o bien por llegar tarde a los tratamientos, o bien porque se ha ignorado el problema durante años, es el momento de pasar al injerto o al trasplante.

Sin embargo, si aprendes a captar las señales, todo será más fácil. Y el cabello también necesita hidratación, no sólo productos específicos. Según nos cuentan a Deporte y Vida desde el equipo médico de Redenhair, "para tener un cabello sano y bonito es imprescindible mantener los niveles idóneos de agua sobre el cuero cabelludo. Muchas veces nos olvidamos de la importancia de hidratarlo, la deshidratación capilar se produce por la falta de agua y lípidos en su estructura interna. La hidratación le otorga flexibilidad al cabello y movimiento y los lípidos aportan la unión entre las estructuras de queratina que forman el pelo", por eso es tan importante.

Agresiones externas que dañan el cabello

"Al estar cada vez más expuesto a agresiones externas como la contaminación, el sol, los productos de calor como secadores y planchas, etc. hay que buscar soluciones más específicas para combatir la deshidratación que producen estos agentes", avisan.

"Para reconocer un cabello deshidratado solo tenemos que observar su aspecto, ya que suele estar seco al tacto y sin brillo, el movimiento natural se pierde ya que no es tan flexible, se encrespa con más facilidad, se enreda y las puntas aparecen abiertas. Esto hace que se dañen las células capilares y se deterioren las defensas naturales del cuero cabelludo y lo más grave es que puede desembocar en la pérdida de cabello y en que el cabello empiece a estar más fino y débil", añaden. 

"Además, el efecto principal en la dermis es que un cuero cabelludo seco, después de un tiempo, probablemente tendrá caspa", una señal de socorro de tu cabello.

Químicos a evitar de tus productos capilares

"Los sulfatos son perjudiciales para el cabello, cuero cabelludo y nuestra propia salud. Ya que penetran a través de nuestra dermis capilar pudiendo perjudicar algunos órganos. Para el medio ambiente también es perjudicial ya no deja de ser un desengrasante químico, ya que contamina, por lo que debemos evitarlos para combatir la deshidratación del cabello".