Quizá el nombre de Michael P. Murphy no te diga demasiado, pero en EEUU está considerado como un símbolo nacional que ha recibido las mayores condecoraciones del ejército norteamericano a título póstumo como la Medalla de Honor o el Corazón Púrpura por su valentía en combate. ‘Murph’ perdió la vida el 28 de junio de 2005 cuando tenía 29 años en el transcurso de una misión en la que su equipo, compuesto por cuatro Navy SEALS, sufrió una emboscada mientras trataba de encontrar a un líder talibán en Afganistán.

Después de dejar su cobertura, buscó una posición elevada con el objetivo de contactar por radio para solicitar apoyo inmediato para sus hombres exponiéndose a una lluvia proyectiles. Finalmente logró su objetivo y gracias a su gesta le salvó la vida a uno de sus compañeros, que a la postre fue el único superviviente de la escaramuza.

Marcus Luttrell, así se llama el afortunado, escribió ‘Lone Survivor’ (El único superviviente) basado en la historia de aquel aciago día de infausto recuerdo y que sirvió de inspiración para la película con el mismo nombre protagonziada por Mark Wahlberg (en el papel de Luttrell). Tras lo sucedido, los homenajes se multiplicaron y en la actualidad Michael P. Murphy le da su nombre a parques, plazas, navíos de la marina estadounidense… y a una de sus rutinas predilectas de entrenamiento y probablemente de las más exigentes del CrossFit: The Murph.

Esta rutina, denominada Workout Of the Day (WOD) y que fue renombrada en su honor, es la parte principal de un entrenamiento de Crossfit -y de una tradición en el Día de los Caídos, que se celebra el último lunes de mayo de cada año- compuesto por una combinación de ejercicios que hay que completar en un tiempo determinado, en este caso 60 minutos, y comprenden habitualmente una cantidad respetable de repeticiones.

Hasta tal punto es icónica que llegó a formar parte de la competición de los CrossFit Games de 2015 y 2016. Para que te hagas una idea de hasta qué punto un profesional de la disciplina es un portento físico, en la edición de 2016, la mejor marca la logró en categoría masculina Josh Bridges, compatriota de Murphy, parando el crono en 34:38. Así pues, si alguna vez intentas completar el entrenamiento y bajas de 40 minutos, quizá deberías plantearte optar a los CrossFit Games.

Para el resto, la prudencia debe imponerse ya que estamos hablando de una rutina extremadamente exigente solamente apta para unos pocos privilegiados. Utilzar un chaleco lastrado debería quedar reservado para los que de verdad tienen un nivel competitivo elevado, y no hay que descartar la posibilidad de escalar el entrenamiento y adaptarlo a las circunstancias de cada uno en lo que a repeticiones y tipos de ejercicio se refiere.