“Impactado con este vídeo… ¿se nos ha ido la cabeza a los humanos?, cómo podemos hacer esto y quedarnos tan ‘panchos’. Conteneos a la hora de utilizar plásticos. Recogedlos si estáis en la playa y veis plásticos, aunque no sean vuestros. No sé qué decir. Estoy impactado y de bajón”. Quien habla es Jesús Calleja (54), montañista, aventurero y presentador español, que ha estallado a raíz de un video en el que se observa a un buceador rodeado de plásticos.

Nos gusta disfrutar del los mares y océanos de nuestro planeta pero, ¿qué hacemos para cuidarlos? Una pregunta que a más de uno sonrojará y que esconde una realidad muy dolorosa: parece que nos da igual y no somos conscientes del daño que causamos al ecosistema marino. Seguimos cometiendo los mismos errores mientras las aguas que bañan a nuestras costas se convierten en verdaderos vertederos. Por ello, denuncias como la de Jesús Calleja no deben caer en saco roto.

Según denuncia Greenpeace, hasta 12 millones de toneladas de plásticos entran en los océanos cada año, ahogando los ecosistemas, provocando daños a la fauna y formando parte de la cadena alimentaria. Una situación que de mantener esta dinámica será irreversible. Está en riesgo el equilibrio del planeta y la vida tal y como la conocemos.

Cómo reducir el consumo de plástico

La organización ecologista y pacifista internacional ofrece unas sencillas pautas para reducir el consumo de plásticos y las posibilidades de que acaben convirtiéndose en un residuo más. Con unos pequeños gestos, podemos lograr mucho:

• Cambia las bolsas de plástico por otras reutilizables, carros o cestas.
• No uses vasos, platos y cubiertos de plástico cuando estés fuera de casa.
• Compra tu comida a granel y evita el exceso de envoltorio, como por ejemplo bandejas.
• Cambia los tápers de plástico por los de acero inoxidable o vidrio.
• Evita el uso de cosméticos que tengan en su composición microesferas de plástico
• Bebe agua del grifo, no agua embotellada.
• Elige envases para tus bebidas y líquidos que sean retornables, como el vidrio, en lugar de brik y botellas de plástico.
• Reduce la exposición de tu bebé al plástico, no usando biberones de plástico
• Busca juguetes de madera, tela, o de látex y caucho natural.
• Di no a las maquinillas de afeitar desechables.
• Intenta conseguir productos de higiene y cuidado personal que no estén envasados en plásticos y que no contengan microplásticos en su composición.
• Evita los productos de limpieza envasados en plástico.
• Con los mecheros de metal rellenables, ahorrarás bastante dinero.
• Si es imposible reducir más tu consumo de plástico, recuerda reutilizar esos productos en la medida de lo posible y, en último caso, tirarlos al contenedor correspondiente.