Christian Santos, conocido como el Beckham gallego, es jugador del Deportivo de la Coruña, y y tras los entrenamientos oficiales, suele mostrar en sus redes sociales cómo entrena en casa, ya sea con algún compañero, o en solitario. Y, en muchas ocasiones, lo hace con su preparador físico, Alejandro Lucio López.

Pectorales y Triceps

Para este ejercicio suele utilizar unas pesas de 28 kilos. Un ejercicio a una mano que fuerza también los abdominales, trabajando todo el core. Realiza 4 series de 8 repeticiones con cada brazo. Mientras un brazo trabaja, el otro permanece estirado, y lo hace además apoyando solamente una pierna, la del brazo que trabaja con la pesa.

Utiliza también la máquina de levantamiento de peso, entre 10 y 12 repeticiones, en cuatro series, alternando con las piernas estiradas hacia atrás. Mantiene la espalda recta para no hacerse daño.

Dorsal y bíceps

Ampliar

Para estos ejercicios, utiliza pesas de 22.5 kg, unas 8 repeticiones, y en esta ocasión con los dos brazos a la vez. Para este ejercicio flexiona las rodillas, pra que en la subida no se haga daño en la espalda, ni en la cadera. Añade para los bíceps ahora en la máquina, algo menos de peso para tirar con ambas manos a la vez, sentado, y fortalecer no sñolo brazos, sino también la espalda.

Abdominales

Ampliar

Para los abdominales, es el momento de usar el rodillo en el suelo. Rodillas sobre una protección, y estirar hasta que el cuerpo entero esté completamente plano. Tras una serie larga de repeticiones, vuelve a las pesas, en este momento intercambiando las 22.5 kg en cada brazo. Es una rutina sencilla, como bien dice él, pero agotadora.

Para terminar, realiza abdominales para los oblicuos, con una pesa de 20 kg, levantando la pierna a la cadera flexionada.

Para los hombros

Utiliza las kettelbell para los hombros, pero a modo de abdominales también. Ya que eleva la pesa rusa por encima de la cabeza, se tumba en la colchoneta, y levanta las piernas de forma recta.

Además, realiza levantamiento de peso fijo, hasta 20 kg, con las rodillas ligeramente flexionadas. Es uno de los ejercicios más duros, no sólo por el cansancio, sino por la resistencia.