Ahora que llega la Semana Santa es momento de viajar. Y para ello, nada mejor que contar con la experiencia de Nani Roma, piloto de Rally, campeón en el año 2004, y quien nos va a contar qué se le pide a un viaje perfecto, cómo hacer una maleta diez, y lo importante que es dejarse sorprender.

Eso sí, lo que más odia es que le pierdan la maleta. Y si no le encontramos de viaje, estará descansando en la montaña en casa. Nos ha contado además qué dos alimentos lleva en su maleta por lo difícil que es encontrarlos fuera, y seguro que te sorprenderá la respuesta. Nani Roma, quien acaba de ser nombrado embajador de Roncato, sabe mucho de viajes, de imprevistos, del azar y el destino cuando planificas una experiencia extrema.

¿Ahora que viene Semana Santa, como desconecta Nani Roma?

Mi desconexión siempre es estar en casa. Tenemos la suerte de vivir en una casa de payés cerca del Pirineo, donde hay campo, bosque, jardín... Me gusta arreglar el jardín, estar en casa y hacer deporte. En el sofá no desconecto, intento estar siempre activo.

¿Qué deportes, además del suyo, le gusta ver en TV y practicar?

Me gustan casi todos los deportes. Me fascina ver cómo luchan los deportistas, sean de la disciplina que sean, para lograr sus metas. En cuanto a practicar, principalmente, juego al futbol con los amigos, también practico bici de carretera y motocross con mi hijo.

Si tuviéramos que hacer una maleta como las que hace usted para los Rally, ¿cómo sería?

Para mi la maleta perfecta tiene que tener muchos espacios diferentes, lo que busco en una maleta es que las cosas estén separadas. Además, que sea lo más ligera posible y, obviamente, que tenga ruedas.

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Ahora que viajar en solitario está tan de moda, ¿cuáles serían sus imprescindibles?

Para mi siempre es imprescindible un botiquín completo, el iPad, un teléfono móvil, los cargadores y unas gafas de sol.

¿Cuál es la comida más extraña que ha probado en sus viajes?

No soy de probar comida exótica, pero sí que he comido en lugares extraños: he comido pollo hecho en medio del desierto de Mauritania en una cazuela que no tenía las mejores condiciones de higiene, por ejemplo.

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Suele hablar de la suerte, como este pasado enero, ¿la suerte es tan importante en los viajes?

La verdad que no creo ni en la buena suerte ni en la mala suerte. Estoy convencido que todo tiene un sentido y un por qué y esto se podría traducir a los viajes. Que un viaje salga mejor o peor no es un tema de suerte, si no de que tienen que haberse planificado las cosas bien desde principio. Si viajas a la aventura tienes más probabilidad que las cosas no salgan como habías esperado, pero no puedes culpar a la mala suerte. Simplemente te habrás arriesgado a que las cosas hayan salido diferentes a lo esperado porque has decidido arriesgar y hacer un viaje a la aventura.

¿Qué le pide al viaje perfecto?

Le pediría que me lleguen las maletas y que salga todo como lo he planeado. Cuando viajo por trabajo, además pido que me salgan bien las carreras.

Si le pierden la maleta... ¿cuánto le dura el enfado?

Depende de si voy o vuelvo. Si regreso a casa no me importa mucho, pero si me las pierden en el viaje de ida la verdad es que me enfado más, sobre todo si el viaje es por trabajo. De hecho, en viajes de trabajo siempre llevo una maleta de cabina donde pongo todo el material necesario para las carreras para así asegurarme que si me pierden la maleta grande puedo competir igualmente.

¿Qué es lo más extraño, a nivel personal y profesional, que le ha pasado en un viaje y si no le hubiera pasado a usted, no se lo creería?

Me han pasado cosas muy diferentes. Pero la que recuerdo como la más extraña me pasó en 1998 cuando tuve que abandonar un Dakar en Gao (Malí) y tuve que espabilarme y buscar un transporte hacia Bamako, que estaba a unos 1.300 kilómetros de distancia. Encontré un señor del país que me dijo que me llevaría y la sorpresa vino cuando al día siguiente apareció con un Mercedes cinco plazas e iban siete personas. Entonces teníamos que hacer 1.300 kilómetros ocho personas en un coche de cinco. Al final, acabé conduciendo yo hasta Bamako.

¿Hay algún alimento que lleve en su maleta del que sea muy fan y no consiga fuera de España?

Suelo llevar siempre dos alimentos que no se encuentran siempre en todas partes: jamón ibérico y berberechos.

¿Le queda algún sueño por cumplir a nivel profesional y personal?

Lo importante en la vida es tener sueños. He conseguido más de lo que podía haber soñado, pero seguir soñando para mi es muy importante, porque los sueños te mantienen vivo. A nivel personal, tengo una familia estupenda y no puedo pedir nada más.