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Este es el daño que causa el tabaco mucho antes de que te lo fumes

Las plantaciones de tabaco y su curado posterior tienen un innegable impacto en el terreno, en la agricultura, en los bosques y en la salud de quienes participan activamente en todo el proceso.

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as.com

Al tratar habitualmente temas relacionados con el tabaco, automáticamente pensamos en sus efectos nocivos contra la salud del fumador y de quienes le rodean, pero pocas veces nos paramos a pensar en otra serie de cuestiones que igualmente nos afectan y de las que no somos del todo conscientes.

Por ello, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) advierte, en el editorial de Archivos de Bronconeumología, su revista científica, sobre el importante daño que el tabaco causa también al medio ambiente y a la salud mucho antes de que se consuma.

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Y es que su impacto, más allá de perjuicio directo al fumador, puede resumirse en una serie de puntos a cada cual más preocupante:

· Lleva a la deforestación porque se necesitan 11 toneladas métricas al año de bosque para el cultivo de tabaco y el curado de sus hojas, y aún más para empaquetarlo y fabricar el papel de los cigarrillos. ·

·La deforestación contribuye a un aumento de emisiones de CO2, al cambio climático, a la pérdida de biodiversidad, a la desertización y al aumento de la erosión del suelo, que disminuye su fertilidad y producción y que altera el ciclo del agua.

· La manufactura consume grandes cantidades de recursos naturales, emplea pesticidas, productos químicos, hielo seco, agentes decolorantes, papel, plásticos, acetatos, cartón y aluminio, y es el paso más contaminante en la producción del tabaco.

· La exposición continua a la planta del tabaco y su nicotina a través de la piel provoca la enfermedad del tabaco verde, con náuseas, vómitos, cefalea, debilidad muscular y vértigo.

· El uso de pesticidas, como el dicloro difenil tricloroetano (DDT), y otros contaminantes orgánicos persistentes, tienen efectos en la salud por exposición crónica tales como trastornos congénitos, tumores, cambios genéticos, desórdenes endocrinos, sanguíneos, neurológicos y psiquiátricos.

“La primera tarea que tenemos por delante es la concienciación sobre el alto impacto que el tabaco tiene no sólo para la salud humana, sino también para nuestro medio ambiente. El tabaco contribuye a la contaminación ambiental y eso es algo de lo que no son suficientemente conscientes ni la población general ni los poderes públicos”, concluye el doctor Carlos A. Jiménez Ruiz, presidente de SEPAR.