No deberían. No pueden. En los últimos tiempos han aparecido varios casos de famosos que han protagonizado campañas publicitarias para importantes marcas de gafas que, según las autoridades pertinentes son ilicitas. Alejandro Sanz, Paz Vega o Sharon Stone han prestado sus servicios a Opticalia, Varilux y Alain Afflelou como imagen de colecciones de gafas graduadas. Y es ahí donde radica el problema.

Y es que personalidades públicas como las mencionadas con anterioridad no pueden prestar su imagen en este tipo de campañas al tratarse de un producto sanitario sujeto a una regulación específica. Concretamente al Real Decreto 1591/2009, cuyo artículo 38 es claro al respecto.

“En la publicidad de los productos dirigida al público se prohíbe cualquier mención que haga referencia a una autoridad sanitaria o a recomendaciones que hayan formulado científicos, profesionales de la salud u otras personas que puedan, debido a su notoriedad, incitar a su utilización. Se exceptúa de esta prohibición la publicidad promovida por las Administraciones públicas”.

Adopción de medidas o sanciones

Así pues, tras las quejas presentadas por la Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC) ante la Asociación para la Autorregulación de la Comunicación Publicitaria (Autocontrol), ésta última elevó una consulta a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) que confirmó que las campañas de estas marcas son ilícitas.

Prescribir el uso de gafas graduadas y hacerlo apoyándose en actores o cantantes cuya influencia sobre el público es notoria, es una práctica prohibida. Ahora es la AEMPS la que debe trasladar caso por caso a las comunidades autónomas, al corresponderle a ellas las competencias sobre publicidad de productos sanitarios, para que hagan un análisis y seguimientos de los casos y adopte las medidas oportunas.