El sexo no solo es necesario sino posible y recomendable a determinadas edades. Y no hace falta que un estudio confirme lo que es obvio, pero quizá si ayuda a que no lo perdamos de vista. Y es que una investigación llevada a cabo por expertos de la Universidad Anglia Ruskin y del University College London, ambas instituciones ubicadas en el Reino Unido, asocia la actividad sexual en adultos mayores a un mejor bienestar y disfrute de la vida.

El estudio, publicado en la revista 'Sexual Medicine', incluyó el análisis de datos de encuestas de 6.879 personas, con una edad promedio de 65 años, residentes en Inglaterra y los resultados confirman que tanto los hombres como las mujeres con algún tipo de actividad sexual en los 12 meses anteriores tienen una percepción más positiva sobre su estado en general que aquellos que no eran sexualmente activos.

"Investigaciones anteriores han sugerido que las relaciones sexuales frecuentes se vinculan con una serie de beneficios para el bienestar psicológico y fisiológico, como la mejora de la calidad de vida y la salud mental, y un menor riesgo de ciertos cánceres y eventos coronarios fatales", asegura el doctor Lee Smith de la Universidad Anglia Ruskin

Por prescripción médica

Además, el experto de la universidad británica aboga porque los profesionales de la salud se impliquen a la hora de mejorar la calidad o frecuencia de las relaciones sexuales en deterinados pacientes dados los beneficios a sociados.

“Los adultos mayores no son asexuales y los médicos deben reconocer que una vida sexual frecuente y sin problemas en esta población está relacionada con un mejor bienestar por lo que puede ser beneficioso para los profesionales de la salud consultar a los pacientes geriátricos sobre su actividad sexual y ofrecer ayuda para las dificultades sexuales que se les presenten, ya que la actividad sexual ayuda a las personas mayores a llevar una vida más satisfactoria", concluye.