Un estudio a cargo de investigadores de la Universidad de Edimburgo pone de manifiesto que la capacidad física de las mujeres es comparable a la de los hombres. Sin matices. Y no después de someterse a una prueba cualquiera ya que las mujeres sujetas a estudio se sometieron a un entrenamiento físico extremo y superaron una expedición trans-antártica sin que mostraran más efectos negativos para la salud que los hombres.

De hecho, el estudio también confirmó que, a diferencia de lo que se pensaba en relación a determinados marcadaores que miden indicadores de estrés, niveles hormonales reproductivos y metabólicos, peso corporal y fuerza ósea, los hallazgos indicaron no solo que no se veína afectados, sino que algunos marcadores mostraron evidencia de un retraso en el rendimiento físico relacionado con el ejercicio físico dos semanas después de la expedición.

La investigación ‘Resilient reproductive, bone and adrenal function in Expedition Ice Maiden, the first all-female, unassisted Antarctic crossing’, presentada en la Conferencia Anual de la Sociedad de Endocrinología celebrada en Glasgow (Escocia) y publicada en ‘Endocrinw Abstracts’, no deja lugar a dudas. "Nuestros hallazgos contienen algunos datos potencialmente destructores de mitos sobre el impacto de la actividad física extrema en las mujeres. Hemos demostrado que, con la capacitación y preparación adecuadas, se pueden evitar muchos de los efectos negativos para la salud informados anteriormente", apunta Robert Gifford, principal investigador.

Efectos en trabajos estresantes y exigentes

El siguiente paso para los investigadores será el de trasladar estos resultados a una investigación más profunda que pueda analizar a fondo cómo los diferentes tipos de actividades pueden contribuir a los efectos negativos sobre el estrés y el balance de energía causados por el esfuerzo físico. "Los resultados de este estudio podrían tener una relevancia importante para hombres y mujeres en trabajos arduos o estresantes, donde existe la preocupación de que puedan estar dañando su salud. Si se sigue un régimen de nutrición y entrenamiento apropiado, su salud puede quedar protegida", concluye Gifford.