Toma nota porque es posible que no seas consciente de lo que puede suponer para tu salud andar a paso ligero. Y es que, según se desprende de diversos estudios, entre los que podemos encontrar el llevado a cabo por la Universidad de Sydney (Australia) y publicado en el 'British Journal of Sports Medicine', caminar rápido aporta innumerables beneficios a tu salud. Hasta diez. Ni más ni menos.

De hecho, este hábito de vida saludable, que deberías incorporar ya a tu rutina si no la has hecho, es una manera cómoda y sencilla de hacer deporte sin vernos sometidos a grandes esfuerzos. Por eso los profesionales de la salud siempre recomiendan que caminemos, ya sea rápido o despacio, y abandonemos el sedentarismo, uno de los factores de riesgo con los que convivimos.

10 beneficios de caminar rápido

Así pues, lee con atención porque estamos seguros de que no te imaginabas que caminar rápido podía aportarte tantas satisfacciones:

1. Mejora la respuesta muscular.

2. Incrementa el consumo de calorías.

3. Facilita el control del peso.

4. Activa la circulación cardiaca.

5. Disminuye los niveles de colesterol.

6. Disminuye los niveles de glucosa.

7. Contribuye al control de la presión arterial.

8. Mejora la función respiratoria.

9. Mejora la función intestinal.

10. Mejora la función sexual.

Bonus extra. Mejora la esperanza de vida.

Efectivamente, como consecuencia de lo anteriormente enumerado, caminar rápido tiene una incidencia sobre nuestra esperanza de vida puesto que está relacionado directamente con diversos factores de riesgo. Así, caminar a paso intermedio está asociado con una reducción de la mortalidad del 20 por ciento, mientras que caminar rápido rebaja el riesgo hasta el 24 por ciento. La velocidad ideal para lograr el efecto máximo sobre la salud, sería equivalente a recorrer cada kilómetro entre los 8,5 y los 12 minutos. ¿De verdad vas a seguir sin moverte?