Cuando Rainer Fakesch asistió en sudáfrica a un momento agónico cuando dos miembros de su familia estuvieron cerca de fallecer por ahogamiento, algo en su cerebro se activó. Este ingeniero especializado en la lucha contra incendios fue consciente de que su gran aliado hasta ese momento, el agua, podía también suponer una amenaza para sus seres queridos y para millones de personas en el mundo. Así surgió el embrión de lo que hoy es un innovador dispositivo que pretende salvar vidas.

Se llama 'Ploota' y funciona como una especie de flotador que te mantiene en la superficie en caso de sufrir algún tipo de percance. Y lo mejor de todo es que lo hace de manera autónoma al detectar una posible situación de riesgo gracias a unos sensores que incorpora. De igual forma, puede ser accionado de manera manual, tiene un botón que te indica el nivel de batería del dispositivo y dispone de un cartucho de CO2 intercambiable que permite la carga de los dos pequeños flotadores que se activan llegado el momento.

Su confort y ligereza, solo 280 gramos, evitan las supuestas incomodidades de su uso y está disponible en tres tallas por lo que lo pueden utilizar tanto niños como adultos. Además de ser altamente reutilizable, está indicado para la práctica de una amplia variedad de deportes acuáticos por lo que debe convertirse en un imprescindible para quienes disfrutan del medio acuático y sus enormes posibilidades.

Concebido para la práctica de natación en aguas abiertas y en piscina, pesca, snorkel, windsuf, surf, kitesurf, rafting, remo en barca y en canoa, sky acuático o para su uso en motos acuáticas, Ploota cubre las necesidades de quienes disfrutan del agua como medio recreativo, deportivo o profesional y se puede adquirir por un precio inferior a los 100 euros.

Datos en España

Todos sabemos que España es un país excelente para disfrutar del baño y otras actividades acuáticas, aunque no es menos cierto que hay una lectura negativa y que hace referencia a la cantidad de ahogamientos y otro tipo de accidentes que se producen, especialmente en los meses del período estival. Según los datos recogidos por Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo (RFESS), se han producido un total de 122 fallecimientos a fecha de 30 de junio.

Los datos indican que el 82% de los fallecidos eran hombres (100) frente a un 18% de mujeres (22). Además, el perfil tipo del accidentado habla de un hombre, como ya hemos puntando, principalmente de nacionalidad española y mayor de 35 años. Normalmente, los accidentes se producen generalmente en playas o lugares que carecen de vigilancia entre las 12h y las 18h. Además, especial incidencia tienen este tipo de accidentes entre la tercera edad ya que 29 de los fallecidos tenías 75 años o más. Dato que contrasta con el de los menores de 18 años, cinco fallecidos.