Tras la victoria del Real Madrid toca analizar cómo es posible llegar a este momento de la temporada, sobre todo a nivel físico, y no desfallecer. Para conocer cómo ha sido la preparación de los jugadores de Zidane que han ganado una nueva Copa de Europa, hemos entrevistado para Deporte y Vida a Sergio Guillén, profesor Doctor del Área de Ciencias Biomédicas y de la Salud de la Universidad Europea de Valencia

“En principio, la planificación de la preparación física utilizada por la mayoría de equipos hasta la fecha era el método ATR: Acumulación, Transformación, Realización. Con este tipo de planificación lo que se buscaba era generar un “pico de forma” en un momento clave de la temporada o incluso varios picos, y con tal objetivo las cargas se iban incrementando, gradualmente, a medida que se acercaba ese momento”, nos explica.

“Si tenemos en cuenta esta metodología de planificación, las dos semanas previas al partido (pico de forma) deberíamos realizar un micro-ciclo de ajuste para la competición, mediante el cual poder preparar a los jugadores con una carga de entrenamiento general de nivel medio, pero a su vez alta a nivel específico (fuerza, velocidad, técnica y táctica)”, explica.

Así entrenó el Real Madrid

“Siguiendo esta filosofía de trabajo el equipo llevaría a cabo sesiones de mantenimiento y desarrollo para estabilizar y, al mismo tiempo, obtener los niveles máximos posibles de rendimiento”, un trabajo que habría estado haciendo Zidane.

“Tras finalizar ese micro-ciclo y durante la misma semana de la competición, se realizaría otro micro-ciclo de transformación, en la que se aumentaría la intensidad y se disminuiría el volumen total de la carga, para poder así mantener el nivel de rendimiento máximo gracias a sesiones complementarias y programas de activación específicos”, explica el Doctor del Área de Ciencias Biomédicas y de la Salud.

La importancia de la preparación física

“Durante estos días previos a una competición tan importante, el papel del preparador físico es determinar el estado de forma de cada jugador y, por tanto, lo que necesita en cada momento, en base a: tiempo individual de trabajo por partido y entrenamiento, minutos jugados, kilómetros recorridos, lesiones sufridas, velocidad de desplazamiento media, número de aceleraciones, número de sprints, etc. Es por este motivo que esas semanas se suelen emplear para hacer una revisión y un estudio particular sobre cada jugador, siempre en base a los datos obtenidos previamente”. Y el equipo técnico de Zidane ha trabajado más que en detalle a la vista de los resultados y de cómo ha recuperado Bale la forma y la intensidad, y en la misma medida Benzemá, autores de los goles en la Final de Champions.

Entrenamientos personalizados

En el caso concreto de las dos semanas previas la Final de la Champions, “el preparador físico intentará que todos los jugadores lleguen con la mejor condición posible, adaptando las cargas individuales de cada uno de ellos y coordinándolas con lo que más convenga también de manera grupal. Por ejemplo, si Cristiano Ronaldo se lesionó hace un mes contra el FC Barcelona, sufriendo un esguince de tobillo, seguramente habrá realizado mucho trabajo compensatorio de propiocepción y activación durante estas sesiones previas al partido. Pero, al mismo tiempo, y también dentro de la plantilla, la carga y el tipo de entrenamiento que recibirá otra pieza clave como es Luka Modric, habrá soido muy diferente, ya que ha llegado en condiciones idóneas a este último tramo de la temporada”, incide el doctor.

Destaca también la importancia del último partido de Liga, “de manera grupal también se determinan objetivos a corto y largo plazo, utilizando las competiciones domésticas, que van a permitir medir muchas de las cargas; por ejemplo, el último partido de Liga contra el Villareal sirvió para algunos jugadores como “puesta a punto” de cara a la final de Champions y, en cambio, para otros como trabajo regenerativo o mero descanso porque apenas disputaron unos minutos del mismo”.

Eso sí, “actualmente ya no se utiliza tanto “el pico de forma” en equipos de élite y se recurre más a individualizar la carga”, como ha sido el caso del Real Madrid.